Aparte de leer comics, ver series fantásticas o jugar a videojuegos, todo buen friki que se precie también contará con unos potentes cascos unidos a su reproductor de mp3 -o móvil de última generación- que le acompañen incansablemente junto a su otro complemento por antonomasia, la camiseta de superhéroes. ¿Y qué escucharán estos especímenes en sus largos trayectos en metro o autobús? Seguro que como en botica, la variedad será amplia, pero para aquellos que aún no los conozcáis os presentamos un nuevo grupo que añadir a vuestro surtido musical: El Reno Renardo.
Se trata de un cachondo grupo formado por cuatro bilbaínos perteneciente al género del denominado Freak Metal. Lo que viene a ser un conjunto rockero que, o bien con canciones propias, o bien tomándolas prestadas de otras formaciones para destrozarlas (o arreglarlas, dependiendo del caso), meten en una coctelera ritmos cañeros y letras de guasa, dando como resultado música tremendamente desternillante.
El grupo en cuestión está formado por Jevo (voz), Mikel (guitarra), Ander (bajo) e Iván (batería). Tan solo cuatro tipos, con los tres instrumentos ya mencionados y la ayuda puntual de sintetizador. Un grupo de colegas que, sin apenas pretensiones, se han embarcado en su segunda experiencia musical juntos, para sobre todo, pasar unos buenos ratos y hacérnoslos pasar a todos los demás. Un grupo muy reducido para lo muy bien que suenan sus canciones, que sinceramente dan la sensación de estar producidas por un elenco mucho mayor.
A pesar de ser cuatro amiguetes sin más ansias que las de echarse unas risas, y de comenzar currándoselo en plan casero, incluso editando ellos mismos, la verdad es que se han consolidado con un proyecto que ha ido de menos a más. Más allá de unos meros humoristas, podemos hablar de una gran labor artística en su faceta musical. La base rockera de su música es una pasada. Suena de maravilla y es sensacional ver cómo atrona el comienzo de sus conciertos. La letra está colocada con verdadero ingenio. Sorprende cuando la escuchas por primera vez y se hace pegadiza cuando la pinchas vez tras vez. Y si bien la labor de los instrumentistas es de chapeau, el trabajo de su vocalista es verdaderamente bestial. Es un tío que lo borda, con un registro vocal asombroso que te pone cuarenta voces diferentes, una para cada canción. El “desgraciao” tiene la habilidad de poner la voz de aquel al que imita en cada canción, y si ya solo con la letra te partes, la verdad es que con las voces que pone te meas. Y el tipo afina y todo (al menos en los discos, los conciertos son otra cosa, pero la complejidad técnica del directo trae sus limitaciones).
Ponemos estos por elegir alguno, pero hay muchos más. Especialmente recomendabes son los temas de Cambio Radical, el Bardo Bastardo, el Reno Renardo, Señoras, Mi Casa, Tu Hámster o Vomito. Y una imprescindible: la que le dedican a la SGAE. Darle al play y veréis como os reís y os aficionáis. Os daréis cuenta de que la temática que tratan es muy variada, desde temas “frikis” como El Señor de los Anillos o la Guerra de las Galaxias hasta crítica social y burlas descaradas de asuntos de actualidad o situaciones cotidianas.
De sus canciones aproximadamente la mitad son rigurosamente suyas y la otra mitad son “réplicas” de muchos otros grupos (Mecano, Jarabe de Palo, Gabinete Caligari…). Pero hasta las réplicas molan tanto que os aseguro que muchos se las han aprendido antes que las originales. Como mera anécdota decir que el otro día estaba yo en el Hard Rock de Lisboa cuando comienza a sonar un tema y digo: ¡Ostras! ¡El Reno Renardo! Para dos segundos después decir: ¡ah, no, que es Rammstein!
Desde aquí tan solo esperamos haberos despertado la curiosidad hacia un grupo que sinceramente creemos que merece la pena. Y para el Reno, ánimo chicos! Os deseamos mucha suerte con los nuevos proyectos que seguro que tenéis en mente y esperamos que creéis mucha más de vuestra peculiar música…