Por fin. Ya podemos salir de dudas. ¿Es Dan Slott un loco? ¿Un genio? ¿Merece el tipo que ideó el plan macabro que lo enterremos vivo? Bueno, no es una decisión fácil, aunque a grandes rasgos puedo decir que estoy más que satisfecho con lo que se propone en el primero número de la nueva serie sobre el trepamuros.
Primero quería comentar el impacto que ha tenido el #700 de Amazing Spider-Man durante estas semanas desde que se ha sabido lo que iba a suceder, y es que no está exento de polémica. Algunas cadenas de televisión se han hecho eco del asunto, aunque como siempre de manera desafortunada, con poca información al respecto y mareando más la perdiz que otra cosa… Algunos periódicos también han comentado lo sucedido pero con titulares que destripan por completo el contenido del citado número, aunque bueno, para eso echad un vistazo a la segunda edición del #700 y decidme que la portada no es lo suficientemente spoiler. Dan Slott comentó que Internet se iba a partir en dos… yo diría que todos nos hemos quedado de una pieza y eso es en parte culpa de Marvel, pues al dar tanta información del evento se ha perdido la sorpresa y ha hecho que pocos fuéramos con otro pensamiento de suceso que el que vimos en realidad.
Ahora bien, en lo que se refiere a Superior Spider-Man puedo decir que sí sorprende. En un principio, al tener todos los recuerdos de Peter Parker pensé que Otto sería una prolongación del mismo y que pocas novedades veríamos. Pero todo lo contrario, Slott consigue crear otro personaje totalmente dinámico y vemos lo diferente que puede llegar a ser este nuevo Spider-Man. Para empezar el traje es distinto, y lo más destacable es las garras que posee, una nueva arma muy interesante y que ya juega un papel importante en este primer capítulo. Como pudimos saber en el último número de la anterior serie Peter Parker se contenía cuando golpeaba, pero Octavius no y así lo hace notar, pues destroza con facilidad a los nuevos y más cutres 6 siniestros. Los villanos son viejos conocidos como Shocker, aunque tienen más bien pocas posibilidades contra el nuevo Spider-Man, pues como bien se explica en este número su mente superior hace que llegue a niveles estratégicos increíbles. Estoy seguro que estas nuevas características dotarán al personaje de mucha más riqueza en el campo de batalla.
En cuanto a relaciones personales hemos podido ver pinceladas con MJ, quién obviamente se ha dado cuenta que hay algo diferente en Peter, aunque no sabe qué. Él por otro lado solo piensa en ella como un objeto de deseo, aunque digo desde ya que estoy seguro que finalmente será algo más, y sino al tiempo. A parte de Mary Jane ha tenido contacto con un trabajador de Horizon Lab. y su jefe, quienes ven cambios en Parker aunque este consigue sacárselos de encima con su labia y sus confabulaciones difusas. Durante todo el capítulo vemos como Otto lucha por convencerse de que él es Peter Parker y que sus logros ahora llevan otro nombre, realmente una conversación/lucha interior interesante teniendo en cuenta lo vanidoso y egocentrista que es.
El número sería perfecto hasta la penúltima página pero seguro que muchos fans estarán conmigo que se han sorprendido muchísimo de ver que desde Marvel o han reculado o nos han engañado. La mente de Peter Parker sigue en su cuerpo aunque impotente, no tiene control sobre su cuerpo aunque sí que puede tomar algunas decisiones. Esto, que llevado de otro modo, más sutil, sería genial, ya que hace que los fans del Peter original no estemos preocupados, pero de la manera tan obvia y directa en que lo vemos no me hace más que confirmar el miedo que los directivos de Marvel tienen ahora mismo con perder fans de una de las series que más vende. Quizás finalmente las amenazas a Slott se hayan cobrado sus frutos y hayan adelantado el misterio, pero no es una buena manera de solucionarlo. Quitando esto el número es genial, mucha acción, muchas novedades y no aburre en ningún momento y todo es gracias a Slott.
En los lápices tenemos a Ryan Stegman, que si bien no es un gran conocido en el mundo del cómic hace un trabajo sobresaliente. Se podría definir el estilo de Stegman como un Ramos (por ser el que ha dibujado hasta ahora Spider-Man) llevado a su punto más álgido, mucho más maduro. El estilo más “manga” que pueda tener Ramos se convierte con Stegman a un dibujo muy personal y lleno de carácter. Consigue una expresividad increíble, incluso con un Spider-Man enfundado en sus nuevas mallas. Sus primeros planos son magníficos y la distribución de las viñetas perfecto. Realmente es un gran complemento al guion de Slott.
Para terminar solo puedo decir que el cómic es brillante (por todas las novedades que se incluyen en tan pocas páginas) pero que su final es penoso. Personalmente no me gusta que me destripen lo que debería haber sido el misterio del año en el primer número y no entiendo esta estrategia por parte de Marvel, esperemos que en los siguientes números nos expliquen más. Por ahora solo queda esperar y seguir confirmando que este Spider-Man es SUPERIOR.
