Como sabréis, en breve estrenan Kick-Ass 2. Mis idolatrados Mark Millar y Romita Jr. han sacado una “precuela” de la película que estrenarán en breve.
Kick-Ass 2, el cómic, me dejó algo frío, con la impresión de que lo habían sacado para cubrir el expediente. No me malinterpretéis, no es que sea malo, simplemente no es tan bueno como el primero.
En el caso de Hit-Girl, vuelve a tener esa chispa, ese nosequé que te engancha y que hace que adores al personaje, dejando en un segundo plano a Kick-Ass, tomando todo el protagonismo y actuando como la diva que es. La historia arranca con Dave intentando aprender de Mindy para ser un superhéroe de los buenos, y a la vez enseñándole a ella a comportarse como una niña de 12 años.
A Mindy le cuesta mucho adaptarse a su vida “civil”, ya que está acostumbrada a resolver los asuntos de forma violenta, y eso en el instituto no es la mejor forma. ¿O quizá sí?
A la vez, su nueva familia, compuesta por su madre y Marcus, se ve amenazada por el hermano de Johnny Genovese. Es entonces cuando las cosas se ponen serias, muy serias. Los que queráis saber cómo sigue, os toca visitar vuestra librería más cercana.
En definitiva, os lo recomiendo vivamente, ya que es un regreso al espíritu original de Kick-Ass.