‘Splendor‘, el juego con el que retomamos la sección de juegos de mesa esta semana, es rápido, fácil de aprender y muy adictivo: el triplete del ‘filler’ perfecto. La ambientación es bastante interesante: seremos ricos mercaderes de joyas del renacimiento que comprarán minas, rutas de transporte y joyeros artesanos para hacerse cada vez más ricos y a la vez obtener mayor prestigio. Con un sencillo sistema de compra de cartas en la mesa, el juego se desarrolla con mucha velocidad, sobre todo si planeas jugadas de antemano. Diseñado para ser jugado de 2 a 4 jugadores, yo recomiendo jugar siempre que sea posible con el número máximo, que es como se disfruta más ‘Splendor’.
La caja de ‘Splendor’, dura y resistente, contiene los siguientes componentes:
- 35 fichas de piedras preciosas, entre rubís, esmeraldas, zafiros, diamantes y ónices, de plástico resistente.
- 5 fichas de oro, que sirve de comodín, también de plástico resistente.
- 90 cartas de desarrollo (que recomiendo enfundar), distribuidas en tres niveles de precios.
- 10 losetas de noble, en cartón, los componentes más delicados.
- Un manual de instrucciones.
El diseño de las cartas y las losetas de noble es la parte que más destaca. Están ilustradas con gusto, al estilo del dibujo de la caja. Aprecio el detalle de las fichas en plástico resistente, porque se van a usar mucho y de haber sido de otro material hubieran sufrido demasiado al poco tiempo.
Para preparar una partida de ‘Splendor’ solo hay que distribuir las cartas encima de la mesa, junto con las losetas de noble y las varias fichas de piedras preciosas y oro. Las cartas están separadas en tres grupos según su valor, que se dividirán en sendos mazos. A la derecha de cada mazo se colocarán las primeras cuatro cartas boca arriba. En otra parte de la mesa se pondrán boca arriba tantas losetas de noble como jugadores haya más una. Por último se pondrán las fichas en montones, divididas por tipo, en otro lado.
Una vez hecho esto, ya se puede empezar a jugar. En un turno de ‘Splendor’ se puede hacer una de 4 acciones: coger 3 fichas de piedras preciosas de colores diferentes (no oro), coger dos fichas de piedras preciosas del mismo color, comprar una carta o reservar una carta y coger una ficha de oro. Las cartas se compran con fichas de piedras preciosas (o oro, que sirve de comodín), de modo que al principio tendremos que ir alternando coger fichas y gastarlas en comprar cartas. Las cartas que vayamos comprando, llamadas cartas de desarrollo, ofrecen un bonus automático a la hora de comprar otras cartas, equivalente a tener permanentemente la ficha de piedra preciosa correspondiente. Al principio servirán de ayuda para comprar más deprisa, sin tener que acumular tantas fichas, pero al final lo óptimo será poder comprar sin siquiera gastar fichas, solo con el bonus.
Si reservamos una carta en ‘Splendor’, la pondremos en nuestra mano para pagarla en otro turno más adelante. Haciendo eso ganaremos una ficha de oro que sirve como comodín y a la vez evitaremos que otro jugador compre dicha carta. No podremos tener más de tres cartas reservadas a la vez en la mano y si, por casualidad no quedan fichas de oro en la mesa, será posible reservar de todos modos pero no nos llevaremos ninguna ficha.
Algunas cartas de desarrollo, sobre todo a partir del segundo y tercer niveles, no solo dan bonus sino que también otorgan puntos de prestigio, la clave de la victoria. Cuando un jugador llegue a 15, se jugará la ronda hasta el final y se decidirá el ganador. Otra cosa que también aporta puntos de prestigio son los nobles. Las fichas de noble tienen un requisito mínimo que hay que cumplir únicamente en bonus. Al final de cada turno se comprueba si el jugador llega a los requisitos de un noble, de ser así, se roba la loseta de noble y sus puntos pasan a contar para el cómputo final de puntos de prestigio. Si se pueden tener dos nobles a la vez, hay que elegir uno. Recibir un noble no cuenta como acción.
Y eso viene a ser todo, pero para jugar bien a ‘Splendor’ a nivel competitivo, hay que tener en cuenta ciertas recomendaciones. La primera es que no todas las acciones de un turno son igual de válidas. La prioridad en cada turno debería ser comprar siempre que fuera posible. Si eso no fuera posible, la segunda prioridad debería ser coger tres fichas de piedra preciosa, si no sirven ahora, tarde o temprano lo harán. La tercera prioridad debería ser coger dos de un mismo color y por último reservar. Por jugoso que parezca el oro, es solo una compensación por no poder hacer ninguna de las otras acciones, en realidad. Pero en fin, lo mejor será que lo probéis, engancha mucho y os costará hacer solo una partida. En muy poco tiempo veréis como desarrolláis vuestro propio estilo de juego y os picáis una y otra vez. ‘Splendor’ es muy divertido.
Distribuido en España por Asmodee.
De 2 a 4 jugadores
Tiempo de juego: 30 minutos
PVP: 26 €
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