Kerascoët es el dúo artístico formado por los parisinos Marie Pommepuy y Sébastien Cosset (colaboradores en obras como ‘Donjon’, ‘Beauté’ o ‘La virgen del burdel’). Precisamente es a partir de una historia imaginada por Marie y guionizada por Fabien Vehmann (guionista de Spirou y Fantasio o ‘Green Manor’) que nace la historia que tenemos entre manos, titulada ‘Preciosa oscuridad’ y editada por Spaceman Books.
‘Preciosa oscuridad’ abre en un escenario difícil de identificar, en plena merienda (y cortejo) entre el Príncipe y Aurora. De repente la oscuridad se cierne sobre ellos y tienen que escapar al bosque, junto con el resto de pequeñas horrorizadas criaturas (¿hadas, o tal vez manifestaciones de la personalidad de la Aurora-niña?). La pequeña comunidad de seres diminutos se instala alrededor del cadáver de una niña, también llamada Aurora. Tienen que aprender a convivir, pero las rencillas y el paso de las estaciones les complicarán la vida.
Imaginad ‘Los diminutos’ (aquellos “seres bondadosos”) convertidos en criaturas terribles, abandonados en un mundo siniestro y peligroso, en el que la supervivencia y las bajas pasiones (ira, envidia y presuntuosidad) los llevan por caminos oscuros. No toda traición (cada una más dura que la anterior) es deliberada. Hay accidentes, casualidades y omisiones que van diezmando la pequeña comunidad de Aurora. Pero las pequeñas crueldades, vistas a veces a través de unos ojos terriblemente inocentes, se van acumulando, como en las obras de Edward Gorey. El tono es amargo, irónico, de cuento de hadas clásico (los cuentos macabros que funcionaban como lecciones, si bien en ‘Preciosa oscuridad’, más que aprender una lección, la crueldad se acepta como se acepta el paso del tiempo y la misma mortalidad).
Un dibujo infantil, a lápiz, con personajes de formas redondas y blancas, que me ha recordado al de Srta. M. El estilo de Kerascoët cuando dibuja Aurora y el resto de personajes “menudos” (de líneas simples, caricaturesco y, por lo tanto expresivo) contrasta con el de los humanos (mucho más realista y detallado) y la naturaleza (la plantas y las criaturas del bosque se dibujan también con detalle). Los colores vivos de las acuarelas marcan el paso del tiempo dotando de aire de ilustración infantil esta historia terrible.
La edición de Spaceman Books no deja nada que desear a la original francesa: edición en cartoné a todo color, 96 páginas y traducción de Lorenzo F. Díaz (responsable de la traducción de ‘Koma’, ‘Agujero negro’, ‘La educación de Hopey Glass’ o ‘La balada de Halo Jones’, entre cómics protagonizados por Rorschard y John Constantine, entre otros). Cuesta 22 €.
‘Preciosa oscuridad’ es un cómic de terror y fantasía escondido en una pequeña fabulilla que nada pretende enseñar y que desconcierta y escandaliza con su manera de mostrar y elidir. Deja muchas incógnitas en el aire pero satisface al ver la evolución de los personajes y su manera de lidiar contra las penalidades externas y los demonios internos.
Muy importante: no cometáis el error de darle ‘Preciosa oscuridad’ a un niño. O sí, la relación calidad-precio es bastante buena, así que podéis ahorrar un poco para terapia. La necesitarán. Quedáis avisados.
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[note]Probablemente el cómic más sorprendente, bonito y cruel que se ha publicado o publicará en muchos años. Un señor de las moscas con personajes de cuento de hadas obligados a sobrevivir en un entorno hostil enfrentándose a los peores rasgos del ser humano.
Una obra exquisita y multipremiada que tarda en olvidarse y que obliga a ser releída para comprobar que de verdad has leído “eso”. Un cómic impresionante y brutal.[/note]
