Si eres un seguidor habitual de esta web, es casi seguro que también te consideras fan de ‘The big bang theory‘, serie americana de éxito que, por un motivo u otro, hemos mencionado repetidas veces en distintos artículos. Su debut tuvo lugar en la CBS el 24 de septiembre del 2007 (aunque en España la hemos disfrutado a través de Neox). Con nueve temporadas a sus espaldas, parece que Chuck Lorre y Bill Prady, los creadores, piensan que aún les queda mucho que contar, porque tienen previsto rodar al menos dos etapas más. Los comentarios frikis, los simpáticos chistes y las peculiares personalidades de los protagonistas han logrado, hasta ahora, el equilibrio perfecto para satisfacer a los espectadores. Como un artículo que analizara a todos los protagonistas resultaría eterno, en esta ocasión nos centraremos en uno de los máximos responsables de mantener a los seguidores de la serie pegados al televisor. Me estoy refiriendo al actor Jim Parsons, que interpreta a nuestro chico de la semana: Sheldon Lee Cooper.
Pese a tratarse de un genio en el campo de la física teórica (sobre todo en la teoría de cuerdas), con un cociente intelectual de 187, el personaje, natural de Texas, hijo de una fanática religiosa y fan incondicional de Spock, es un completo desastre a la hora de integrarse con el resto de la humanidad. Sus mejores amigo son Leonard Hofstadter (su compañero de piso, al que interpreta Johnny Galecki), Howard Wolowitz (encarnado por Simon Helberg) y Rajesh Koothrappali (cuyo papel recae en Kunal Nayyar), aunque las rarezas de Sheldon hacen que la convivencia diaria sea muy complicada, lo que da lugar a las más disparatadas y divertidas situaciones. Los que salen peor parados de esta situación son Leonard, que se vio obligado a firmar un contrato de compañeros de piso repleto de normas absurdas y surrealistas, y Howard, cansado de escuchar las bromas que Sheldon hace a su costa por ser el único de los cuatro que no tiene un doctorado.
Al inicio de la serie, conocemos a Penny (interpretada por Kaley Cuoco), una chica joven y atractiva, que trabaja como camarera pero sueña con ser actriz y que se muda a la puerta de enfrente del piso de los protagonistas. Leonard se siente inmediatamente atraído por ella y, debido a sus continuos intentos de conquistarla, su presencia se hace tan habitual que acaba por convertirse en una más del grupo, por mucho que Sheldon lo encontrara ilógico inicialmente. De hecho, Penny ha servido de gran ayuda para que los chicos se socializaran algo más con el mundo exterior.
Llegado a este punto, es un buen momento para enumerar las ya mencionadas rarezas del protagonista del artículo. No obstante, son tantas y tan absurdas que pido perdón por anticipado si me dejo alguna que sea clave en el tintero: piensa que no hay nadie tan inteligente como él, excepto quizás Stephen Hawking (que como tantos otros famosos, ha realizado cameos en la serie); tiene su propio sitio en el sillón y nadie puede usarlo, aunque él no lo esté utilizando; hace simulacros nocturnos de supervivencia; prohíbe a cualquiera, incluido a su compañeo de piso, alterar la temperatura del termostato del apartamento; detesta los silbidos; siempre que va de visita, llama tres veces a la puerta, mientras pronuncia el nombre de la persona a la que desea ver; es un fanático de los trenes y las banderas; manipula constantemente a Leonard debido a las puntillosas cláusulas contenidas en el contrato de compañeros de piso; corrige a todo el mundo hasta el más pequeño de los errores gramaticales; es reacio al contacto humano; monta un número si su estricta dieta alimenticia se ve alterada; grita la expresión ‘¡Bazinga!‘ cada vez que pega un corte a alguien (aunque en la versión española la han traducido inexplicablemente como ‘¡Zas en toda la boca!‘); no suele pillar los sarcasmos; siempre hace lo imposible para salirse con la suya, aunque sus motivos carezcan de sentido, y pide que le canten la bochornosa canción ‘Dulce gatito‘ cuando está en enfermo, cuyo texto reproduzco a continuación:
El dulce gatito
parece una bola de piel.
El bonito gatito,
duerme, gatito,
bien, bien, bien.
Afortunadamente, también posee alguna buena cualidad, aunque no sean muchas, como la de estar dispuesto a prestar dinero a quien lo necesite, sin ponerle ningún tipo de presión para que se lo devuelvan.
Es evidente que una persona que no disfruta con el contacto humano lo tiene complicado para tener pareja. De hecho, Sheldon, al principio de la serie, no mostraba interés alguno en salir con ninguna chica. Sin embargo, la aparición de la bióloga Amy Farrah Fowler (a la que da vida Mayim Bialik, ya famosa por haber interpretado a Blossom en la serie homónima) a lo largo de la tercera temporada cambió las cosas. Inicialmente, el protagonista se negaba a considerarla como algo más que una amiga. No obstante, aunque su relación es bastante peculiar y nada lujuriosa, ambos han ido avanzando poco a poco. Al menos era así hasta que la chica, cansada del desapego emocional demostrado por Sheldon, ha acabado cortando con él. Habrá que esperar a que emitan la novena temporada (que se estrena este jueves en Neox) para saber si se arreglarán, porque, por increíble que nos parezca, sabemos que el protagonista le ha comprado una alianza a Amy.
Tal es el éxito de la serie que, además de contar con su propia línea de muñecos de todas clases, se han hecho diversas camisetas, siendo las más famosas aquellas que se burlan de las manías de Sheldon: las hay que parodian su absurda forma de llamar a las puertas, además de otras que explican como funciona el juego de ‘piedra, papel, tijera, lagarto, Spock‘, creado por Sam Kass, que tanto gusta al protagonista de este artículo y cuyas normas explico a continuación:
Las tijeras cortan el papel, el papel cubre a la piedra, la piedra aplasta al lagarto, el lagarto envenena a Spock, Spock destroza las tijeras, las tijeras decapitan al lagarto, el lagarto se come el papel, el papel refuta a Spock, Spock vaporiza la piedra, y, como es habitual… la piedra aplasta las tijeras.
A continuación, para rematar el artículo, señalo algunas de las frases más populares que Sheldon ha pronunciado a lo largo de la serie:
Ya sé que te da miedo decepcionarme, pero espero que te consuele saber que mis expectativas sobre ti son muy pobres.
Voy a pedirle que elija entre el sexo y ‘Halo 3’. Que yo sepa el sexo no ha sido mejorado ni incluye gráficos 3D ni armas de nueva generación.
El miedo a las alturas es ilógico. El miedo a caer, por otro lado, es prudente y evolucionista.
En invierno ese sitio está lo bastante cerca del radiador para causar calor pero no lo bastante para causar transpiración. En verano se encuentra en el punto perfecto de las corrientes al abrir ventanas ahí, y ahí. La televisión está en un ángulo que no es ni directo desalentando la conversación… ni tan amplio que cause un tirón de cuello, podría seguir, pero creo que me habrás comprendido.
Por favor, no te lo tomes a mal, pero el día que ganes el premio Nobel, será el día que comience mi investigación sobre el coeficiente de arrastre de las borlas en las alfombras voladoras.
Como sabes, no soy muy bueno leyendo las expresiones faciales, pero esta vez voy a arriesgarme: o estás triste, o tienes náuseas.