Hoy os traemos una entrevista que hemos realizado a Carlos Sisí, escritor que acaba de publicar con la Editorial Minotauro, del grupo Planeta, su última novela ‘Alma‘. Nacido en Madrid en 1971, este autor se dio a conocer al gran público gracias a la saga ‘Los Caminantes‘, que situaba el apocalipsis zombi en tierras malagueñas, donde él mismo reside con su familia. Esta serie de libros se convirtió en un auténtico fenómeno (ha sido publicada también en Reino Unido, Francia y Estados Unidos) y arrastra a una legión de seguidores, aunque Carlos Sisí, lejos de encasillarse en el llamado “género Z”, ha publicado novelas muy diferentes como ‘La hora del mar’ o ‘Panteón‘ (reseñado aquí), que fue ganador de la X edición del Premio Minotauro.
También ha entrado en el mundo del cómic con el divertidísimo ‘Midnight‘, del que prepara una segunda parte junto al dibujante Ittai Manero. Es un autor muy activo en las redes sociales, y podéis seguir su cuenta de Twitter o de Facebook, donde escribe habitualmente. También podéis contemplar su otra afición, las fotos de juguetes, en las que utiliza sus figuras de Lego y Hasbro para recrear escenas de películas y novelas de fantasía y ciencia ficción.
La Casa De EL: La saga de ‘Los Caminantes’, ‘Edén Interrumpido’, ‘La Hora Del Mar’, ‘Panteón’, ‘Midnight’, ‘Troll’ y en breve, ‘Alma’. O lo que viene a ser lo mismo, zombis, terror psicológico, eco-thriller, ciencia ficción, un cómic que recupera lo mejor de las series de tebeos antiguos de regusto europeo, fantasía y un libro que promete ser un auténtico pelotazo y sobre el que dejaré que tú des la definición de género un poco más adelante. Aparte, tienes mujer, tres hijos, tu propia empresa de soluciones para internet, gestionas tus redes sociales… La primera pregunta es obligada. ¿Cuándo duermes? O mejor dicho, ¿qué día reservas para dormir?
Carlos Sisí: (Risas) La verdad es que tengo un problema con eso de dormir, siempre me da la sensación de que me quita tiempo para hacer cosas. Por el día está el trabajo, los niños, cosas… la noche es creativa, es tiempo para hacer, disponer, pensar, jugar. De noche pongo en marcha todo eso que ha ido moviéndose por mi cabeza durante el día.
LCDE: Vamos a empezar un poco por tus antecedentes antes de la novela que hoy nos ocupa. Te diste a conocer en el mundillo literario con ‘Los Caminantes’, de la que tenemos cuatro entregas y una quinta en la recámara (‘Tempus Fugit’), otras dos novelas, un cómic, y tres novelas cortas disponibles en formato electrónico. Eso por no mencionar ‘Vienen cuando hace frío’, que más de uno está esperando que se convierta en una realidad. ¿Alguna vez imaginaste que llegarías a acumular tal currículum literario?
CS: Nunca me propuse publicar, y nunca he tenido ninguna expectativa sobre dónde voy con todo esto. Ocurre. Escribo novelas y hago cosas que supongo que acaban encontrando salida. Es verdad que a veces llega algún fan con absolutamente todo lo que he hecho en una mochila, para que se lo firme, y me quedo impresionado. Han sido seis años muy divertidos, eso sin duda, y espero que sigan siéndolo. Yo me lo paso bien, la gente también… parece un buen trato.
LCDE: Una cosa que en mi opinión has hecho muy bien es que, pese a tanto libro Z, has luchado por evitar que te encasillen en dicho subgénero, tocando muchas otras ramas que ya he mencionado arriba. ¿Crees que lo has conseguido?
CS: ¡La verdad es que no he luchado nada! Terminé con ‘Los Caminantes‘ porque me parecía que ya había muchos títulos en el mercado, y porque me apetecía escribir sobre otras cosas… ¡hay tantas historias que contar y que explorar! Pero mis lectores seguían pidiendo más Caminantes, y yo me lo paso muy bien con ese pequeño universo que ya tiene mucha historia detrás, así que, ¿por qué no seguir?. No me importa que me “encasillen” si es lo que hago y quiero hacer, sería como intentar escapar de mí mismo. Tampoco es algo que yo pueda decidir, hay lectores que me conocen como el autor de ‘Panteón‘, porque el tema de los zombis no les gusta, y está bien así.
LCDE: Y ahora, retomando la pregunta que he avanzado al principio, te reto a que me definas el género en el que clasificarías ‘Alma’, tu nueva novela que este mes verá la luz.
CS: He aquí una pregunta difícil (Sonríe). Me gustan tan poco las etiquetas… “novela de género”, “terror sobrenatural”. Blah. Las historias fluyen, se desparraman como la vida, y están llenas de cosas; no me gusta que acaben en cajas con un cartel. Supongo que ‘Alma’ tiene terror, claro que sí, pero cuánto terror lo decidirá el lector. Supongo que tiene un mensaje importante, por descontado; supongo que puede hacer que algunos miremos este mundo que nos rodea con otros ojos, o desde una perspectiva algo diferente. En realidad es una novela que habla del amor, o de la ausencia de amor, así que ponle un 12% de romántica, ¿o sería anti-romántica?
LCDE: ¿Qué es ‘Alma’? Defíneme qué representa esta novela, no la sinopsis, si no lo que es para ti.
CS: ‘Alma’ es una Puerta, y como decía una amiga, es una botella en un mensaje (Sonríe). Oh, recuerdo que cuando terminé de escribirla, pensé que odiaría verla sometida a… “escrutinios literarios” por parte de reseñas, que las habrá, naturalmente, buenísimas, buenas, malas, regulares y coléricas. Pero no quería porque no me parece que sea una novela para ser sometida a estudio o análisis. Se siente, puede que te traspase, puede que no, pero sobre todo, creo es un medio en sí misma. Transporta cosas. Es un medio. Pero en el fondo también es una novela, con personajes, con una trama, con una historia… y será observada como tal, qué duda cabe.
LCDE: Tú y yo hemos hablado acerca del proceso de documentación de la novela, de lo que has investigado, de lo que has descubierto, de lo que has vivido. ¿Podrías por favor contarles algo sobre dicho proceso a nuestros lectores?
CS: ‘Alma’ ha requerido mucho esfuerzo. Mucho. Escribirla ha sido un viaje alucinante por otra realidad de las cosas. Un viaje hacia fuera pero también hacia dentro. Ha habido momentos increíbles, ha habido dolor, introspección, descubrimiento, y magia, esa magia sutil que hace que las cosas funcionen de cierta manera misteriosa y sorprendente. Siempre me gustó lo paranormal, las sesiones de ouija, las fotos de fantasmas, los programas de Cuarto Milenio y Clara Tahoces (sonríe) pero no tenía ningún juicio que emitir sobre toda esa información que me llegaba: era ocio, entretenimiento, algo que podía ser, o no; algo que hace que sientas un cosquilleo en la espalda, o un punto de inquietud agradable que hace que un miércoles cualquiera tenga un aura diferente.
Pero aunque tenía una mente abierta para esas cosas, cuando empecé a escribir mi historia movido por el interés morboso del lado más peliculero del mundo de lo intangible, descubrí una verdad aplastante: que no podía, porque no sabía nada. ¡No tenía ni idea de cómo sentía una médium, qué veía o experimentaba, o cómo casaba esa manera de sentir con lo cotidiano y mundanal! Oh, podía inventar mil historias sobre cosas que reptan, y sombras… y abyectos espectros escondidos por los rincones de cualquier casa. Tenía experiencia y una mente entrenada para ello, pero sería algo vacío, estéril. Así que investigué, y hablé, y conocí, y me hicieron sentir y ver, y después de eso vino el trabajo duro. Pero al final, el resultado es que ya no se trata de “creer”: Ahora SÉ. Ya no diré que hay un mundo espiritual aquí entre nosotros, es que somos ese mundo. Pero así como no piensas en el trabajo en la hora y media que dura una película, ahora mismo estamos distraídos con otras cosas, aprendiendo, experimentando, en estos días de tierra y carne. En esta… escuela. Comprender el esquema global de todas esas cosas, cómo encajaban las piezas del gigantesco puzzle que supone el entramado de la existencia, fue complicado. Una vez tuve mi percepción sobre todo eso, intenté contar una historia que funcionase. Y tuve mucha ayuda, muchísima. Pero creo que he, hemos hecho un buen trabajo.
LCDE: Esto es un poco apreciación personal, pero estoy convencido de que ‘Alma’ va a suponer un antes y un después para Carlos Sisí. ¿Tú qué opinas?
CS: Me gustaría que fuese así para los lectores. ¿Sabes?, estaba muy obsesionado por aprender sobre ese mundo ignorado, apartado y desechado como patrañas. ¿Fantasmas?, ¿percepciones extrasensoriales? Estamos en pleno siglo XXI, por el amor de Dios (Sonríe). Por eso quería aprender, para que la mayor parte de la novela fuese tan real como me fuese posible, sin sacrificar la emoción de la historia. Pensaba que, si es cierto que todo ese conocimiento está en nosotros pero lo tenemos aparcado, temporalmente relegado al inconsciente, vetado de alguna forma, entonces al leerlo resonaría muy dentro. Es como cuando escuchas a alguien y piensas: “Es cierto. No sé cómo lo sé, pero sé que dice la verdad”.
LCDE: Si no me equivoco, los “lectores cero” de ‘Alma’ han acabado todos encantados con el resultado, ¿no? Aun así, imagino que el miedo al momento de la publicación no te lo ha quitado nadie. ¿Cómo te sentías al respecto?
CS: Oh, no tenía ningún “miedo” (Sonríe). Estaba mucho más nervioso con cualquiera de las otras novelas. Con ‘Alma’ creo que los deberes están hechos. Ignoro si funcionará, si gustará, si venderá, si llegará, si… pero creo que ES, que está ahí, y que cuenta lo que tenía que contar. Por ejemplo en Facebook veo con una sonrisa un interés notable por parte de mis lectores, algo que era patrimonio de los zombis hasta ahora, y que no había ocurrido cuando anunciaba todas mis otras novelas, incluyendo el cómic de ‘Midnight’. Es curioso, y bonito. Así que estoy tranquilo, funcione o no, yo ya he hecho mi parte (Risas).
LCDE: Aparte de los ya mencionados proyectos futuros, ¿nos puedes adelantar algo más en lo que estés trabajando?
CS: La verdad es que más allá de ‘Tempus Fugit’, la quinta parte de ‘Los Caminantes’, no he concretado nada. Ideas tengo muchas. Hay un título en especial en mi cabeza (en inglés, no sé por qué) que seguramente querrá salir, pero ya veremos.
Entrevista realizada por Carlos J. Lluch.
