‘Como viaja el agua‘ es difícil de definir. Tal como anuncia Astiberri, es un thriller, la investigación de un misterio en clave de serie negra. También es una historia aparentemente costumbrista que captura el Madrid actual en una serie de instantes enlazados de la vida de diferentes personas. Y aún hay más: es denuncia social, es humor e ironía, es un canto a la esperanza unido a una bofetada de nihilismo. Es, al fin y al cabo, una historia en la que nada es lo que parece, y en la que tras atravesar todas las capas y matices, encuentras una reflexión filosófica sobre la vida. Pero vayamos por partes.
Al igual que muchos otros lectores, yo descubrí a su autor Juan Díaz Canales en la famosísima serie ‘Blacksad‘ (que tenéis recomendada en vídeo en nuestra sección ‘Cómics en 2 minutos‘). Unos cómics a los que público y crítica han hecho justicia y que consiguieron ciertos fenómenos bastante llamativos, como añadir un par de premios Eisner a la cuenta española o hacer que algunas personas que no leían cómics se acercaran a este mundillo (conozco personalmente algunos de estos casos). Sin embargo, reconozco que el guion de Díaz Canales, adictivo, con buen ritmo narrativo y al más puro estilo “noir” americano, se vio eclipsado para mí por los fabulosos dibujos de Juanjo Guarnido. Rostros de animales antropomórficos totalmente expresivos, paisajes americanos espectaculares, fondos a los que no le faltaba un detalle… Una auténtica maravilla. Quién me iba a decir que en la primera obra de Díaz Canales como autor completo, iba a encontrar un dibujo que, sin ser tan deslumbrante y quedándose en el estricto blanco y negro, no tiene nada que envidiar al de su compañero.
El protagonista de ‘Como viaja el agua’ es Niceto, un anciano de 83 años, aunque lo cierto es que se trata de una obra bastante coral, en la que varios personajes tienen presencia. Su hijo Román, un médico forense a punto de jubilarse, y su nieto Álvaro, un trabajador del Samur a punto de tener un hijo. Tres generaciones y tres formas distintas de ver el mundo. El foco se sitúa en la generación más anciana, en Niceto y sus amigos octogenarios, que dedican su tiempo al trapicheo y la reventa de objetos robados por la pura emoción de hacerlo. Cuando estos amigos empiecen a ser asesinados de forma violenta y el propio Niceto desaparezca, el misterio estará servido. El final (que no voy a desvelar en ningún momento para que disfrutéis de la lectura del libro) no solo traerá sorpresas y revelaciones inesperadas, sino que se convertirá en la mejor parte del libro.
La construcción de los personajes es muy destacable, ya que a pesar de presentarlos en apenas unas viñetas (la brevedad del cómic no permite más), logra que todos nos resulten familiares y que ninguno de ellos sea plano. Los diálogos y las actitudes son totalmente naturales, y eso ayuda a la cercanía de la historia, ya que es fácil identificarse, o reconocer en ellos a personas de nuestro entorno. Tampoco hay buenos y malos en esta historia: todos son supervivientes, personas que luchan por seguir adelante en una vida cotidiana que dista mucho de ser fácil.
El dibujo es en blanco y negro, serio y austero, con un estilo expresionista que en algunas viñetas saca todo el partido al blanco y negro jugando con la luz y las sombras. Este estilo ayuda a crear esa atmósfera de género negro, que por momentos es opresiva y en otras ocasiones nos traslada a un Madrid siempre atractivo. Los personajes pasean de un punto a otro de la ciudad y el fondo es casi un personaje más. Basta haber visitado algunas veces la capital para reconocer calles, edificios y lugares emblemáticos: el parque del Retiro y sus estatuas, como el fascinante monumento del Ángel Caído, el templo de Debod, el Teatro Real, la catedral de La Almudena, el puente de Toledo y mucho más… Un auténtico homenaje al día a día de la ciudad natal del autor, y que disfrutarán especialmente los que mejor conozcan Madrid.
El dibujo también sirve para hacer diferentes guiños al lector. El ‘Diario de invierno‘ de Paul Auster (una mirada del escritor sobre su vida desde la perspectiva de la vejez) se expone en el escaparate de la FNAC y establece un paralelismo fundamental, ya que la reflexión que plantean ambas historias, tan diferentes en su forma, tiene muchos puntos en común. Otro ejemplo es el DNI de Niceto, cuya imagen abre la segunda parte del cómic. Nos muestra su fecha de nacimiento y no es casual que sea el 14 de abril de 1931, la fecha de la proclamación de la Segunda República en España. Curiosa fecha para un personaje que ha tenido ilusiones, ha luchado por ellas y ahora al final de su vida se pregunta para qué. La obra invita a la relectura y a seguir descubriendo nuevos detalles.
La historia se divide en cinco partes, cada una de ellas señalada con una pequeña viñeta en una página separada, que marca el inicio. Hay dos monólogos interiores de Niceto, uno en la tercera parte y otro en la última, que te dejan literalmente sin aliento. En el último, nos damos cuenta de que el título de la obra, ‘Como viaja el agua’, no es casual. Y es que “queremos pensar que nuestra vida es un viaje como el del agua”… Todo un ejercicio de reflexión y de puro nihilismo, aunque otros personajes y acontecimientos saben hacer de contrapunto a esta mirada desencantada, dejándonos muchos matices para la conclusión.
En definitiva, un cómic diferente que se resiste a ser encajado en ninguna categoría cerrada. Un guion coherente y muy bien equilibrado que nos habla del paso del tiempo y de la forma de enfrentar la vida. Astiberri edita esta obra en cartoné, con una presentación muy cuidada y una portada magnífica. El volumen tiene un precio recomendado de 14 euros y consta de 112 páginas; una historia pequeña en longitud pero enorme en fondo. Recomendable, sin dudas ni peros ni excusas. Leedla.
Juan Díaz Canales
Juan Díaz Canales es un guionista de cómics y director de películas de animación nacido en Madrid el año 1972. Desde joven, el autor siempre fue un aficionado a los cómics, de modo que a los 18 años ingresó en una escuela de animación para aprender todo lo posible sobre el formato animado. En 1996, creó junto a tres compañeros la compañía Tridente Animation, que le llevó a trabajar con diferentes empresas del sector tanto europeas como americanas.
Fue cuando conoció a Juanjo Guarnido cuando comenzó a hacerse conocido, gracias a su obra famosísima obra internacional ‘Blacksad‘, con la que ha ganado numerosos premios entre los que cuenta con un Eisner. En 2015 comenzó a publicar una nueva etapa del famoso cómic ‘Corto Maltés‘ junto al dibujante Rubén Pellejero, y en 2016 lanza su primera obra como autor completo, ‘Como viaja el agua‘.
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Como viaja el agua
112 páginas. Cartoné. Blanco y negro
ISBN: 978-84-16251-53-7
A sus 83 años, Niceto tiene muy pocos alicientes para levantarse cada mañana. Junto al pequeño grupo de sus octogenarios amigos, decide ponerle un poco de sal a su rutinaria existencia dedicándose al menudeo y al tráfico de mercancías robadas. Lo que empieza casi como un pasatiempo se torna inesperadamente en tragedia cuando los compañeros de Niceto comienzan a aparecer muertos en extrañas y violentas circunstancias.
La desaparición de Niceto enciende todas las alarmas de su familia. Su hijo Román y su nieto Álvaro se lanzarán a una búsqueda desesperada por todo Madrid intentando dar con el viejo, aunque para ello deberán desentrañar antes un misterio más allá de su comprensión…
Como viaja el agua, un relato en clave de serie negra y social ambientada en un Madrid actual perfectamente reconocible que navega entre el costumbrismo desenfadado y el thriller urbano con elementos fantásticos, es la novela gráfica con la que el guionista Juan Díaz Canales se estrena como autor completo. Valiéndose de un grafismo realista impregnado de una estética expresionista, plantea una reflexión sobre la vida y la muerte a través de los tres miembros de una familia de diferentes generaciones.
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