The King Of Fighters XIV (SNK, 2016) es la nueva entrega de la saga The King of Fighters, la mítica franquicia de juegos de lucha que comenzó con The King Of Fighters ’94 (1994) y que ha dado pie a numerosas secuelas e incluso al lanzamiento de una película en 2010. En esta entrega pasamos del 2D habitual en los juegos anteriores a un modelado 3D en los personajes disponibles, marcando un punto nuevo en la saga en su llegada a PlayStation 4, la única consola de nueva generación para la que ha salido el videojuego.
Haciendo honor a su reputación de juego de culto en este género, TKOF XIV es un juego con una enorme cantidad de posibilidades en sus combates, sus movimientos y sus personajes. El entretenimiento nunca acaba si nuestra intención es dominar cada personaje y cada equipo de nuestra elección, con sus movimientos especiales de equipo (que puede ser personalizado) incluidos en los característicos combates 3×3 de TKOF. En este sentido, The King Of Fighters XIV puede ser abrumador para aquel que juegue por primera vez a la saga, incluso a aquel jugador ya experimentado en otros juegos de lucha. Es un juego muy complejo en el que hay que echar muchas horas para jugar a un buen nivel y saber manejarse bien, tanto con cada personaje como en general, y muchas más aún para dominar cada aspecto de él. Esto, por supuesto, tiene dos caras: puede llegar a ser algo frustrante para el jugador casual, pero a la vez su curva de aprendizaje hace que sea un juego muy divertido para los amantes de los retos.
El juego de SNK cuenta con dieciocho nuevos personajes, y sus cincuenta personajes totales se dividen en dieciséis equipos de tres luchadores, además de dos jefes finales. Es de elogio que todos estos personajes vengan además desde el principio, sin adición de personajes en DLC posteriores como ocurre en otros juegos de lucha. Estos equipos pueden compartir historia, rasgos de personalidad, como el Team Villain, o en muchos casos y como en otras entregas de la saga, procedencia, como el Team Mexico, conformado por Ramón, Ángel y el temible Rey de Dinosaurios. Japón también está representada con su propio equipo, liderado por Kyo Kusanagi, uno de los emblemas de la franquicia. Podemos probar a todos ellos en la gran variedad de modos que incluye el juego, como el modo Historia en el que podemos observar cómo el personaje Antonov declara abierto un nuevo torneo 3vs3 de The King Of Fighters y luchar para ganarlo, además de comprobar cómo se desarrollan las rivalidades entre los diferentes equipos, lo más interesante a nivel narrativo de este juego. También tenemos otros como el modo Online para luchar contra jugadores de todo el mundo, el modo Misión en el que deberemos combatir de diferentes maneras como Trial, Survival o Time Attack, y el modo Versus para luchar con otros jugadores de manera local. Además de la galería de personajes y canciones del juego, la inclusión de los modos Tutorial y Entrenamiento son un gran acierto de SNK para ayudar a los jugadores novatos a mejorar y a los más experimentados a refinar su manera de jugar. Estos modos de preparación son muy extensos y han sido creados de manera concienzuda, y el modo entrenamiento, que podemos probar mientras el juego se instala, incluye además un entrenamiento online contra otros jugadores que quieran ayudarnos en nuestra misión de llegar a ser el King Of Fighters.
Pese a su amplitud de posibilidades y su largo catálogo de jugadores, The King Of Fighters XIV también tiene ciertos aspectos negativos. El principal problema es el modo online, que en estos momentos necesita mejoras. El matchmaking no es el mejor que hayamos visto, y languidece aún más si lo comparamos con otros juegos online de esta generación, que en este aspecto técnico suele ser rápido e impecable. Es poco consistente, tarda bastante en encontrarnos un rival y en algunas ocasiones, aunque lo haga, el juego tiene tanto lag que convierte al combate en algo injugable y poco divertido. Esperamos que conforme se amplíe el número de jugadores este aspecto mejore, además de que SNK tenga un soporte adecuado para este tipo de problemas. Tampoco brilla por su excelencia el modelado en 3D, y es que el paso desde 2D no termina de hacernos pensar que el juego haya dado un paso adelante digno de las posibilidades gráficas de esta generación, sobre todo en algunos momentos de las animaciones de los luchadores durante las escenas cinemáticas entre combate y combate en un modo Historia cuyo argumento tampoco es nada del otro mundo, y está al nivel de la media de otros juegos del género en este sentido.
The King Of Fighters XIV ofrece muchísimo contenido, una entretenida banda sonora reminiscente de animes como Cowboy Bebop, una increíble selección de personajes, combos, equipos y diferentes modos, y tras muchas horas de juego aún no habremos dominado el juego en su totalidad. En este sentido es una gran compra sobre todo si el modo Online termina de arrancar, pues sus posibilidades pueden ser enormes. La cantidad de luchadores se agradece, pero además los personajes tienen sus diferentes particularidades, carisma y están creados con detalle tanto en lo visual como en el sistema de golpes, infinitos combos y demás que cada personaje tiene de manera única. Y aunque los gráficos no terminen de parecernos sorprendentes, sigue siendo el mejor juego en este apartado de la saga, y TKOF XIV sortea bien perder su tradición 2D para crear un juego de lucha a la vieja usanza, con horas y horas de una excelente mecánica por delante y personajes que revisitar y a los que descubrir. La veterana saga continúa siendo un referente en lo técnico, pero creemos que en lo gráfico, online y narrativa aún necesita dar un paso adelante para desbancar a otros gigantes del género.
Escrito por Álvaro Meléndez y Violeta Sarabia.