“¡Soy el rey del mundo!”
Exclamación que no gritaba únicamente Jack Dawson (Leonardo DiCaprio) a pleno pulmón frente a la proa del Titanic. El propio James Cameron se dejó llevar con estas palabras en el escenario en el que recogió tres de las once estatuillas con las que se alzaría la película en la 70ª ceremonia de los Óscar (1998). Y volvería a repetirlo más tarde en una parodia de sí mismo para el programa del ‘Saturday Night Live’ mientras se encendía un puro con un billete de 100 dólares.
Y es que el canadiense se ha convertido con los años en una especie de Rey Midas que consigue que sus películas alcancen lo más alto en las recaudaciones de taquilla, inflación a parte. Pese a no haber contado con unos inicios fáciles, su incansable trabajo y afán de perfeccionismo ha acabado dando sus frutos.
En ‘James Cameron: El rey del mundo’, editado por Diábolo Ediciones, encontramos una interesante combinación de biografía y filmografía de este técnico del séptimo arte, al que el cargo de director se le queda corto: técnico de efectos especiales y de montaje, director artístico, productor, guionista y, en definitiva, amante del arte de crear películas. Todas estas facetas y algunas más las podemos explorar a lo largo del ameno texto de Juan Luis Sánchez y Luis Miguel Carmona, autores de otros libros del sector como ‘De Perdidos a Star Wars. J.J. Abrams. Un hombre y sus sueños’.
El libro empieza en orden cronológico con un primer capítulo más centrado en aspectos de su biografía, como la admiración que sentía por su madre (y el reflejo que esto tendrá en los roles femeninos de sus películas) y su obsesión por el agua al crecer junto a las Cataratas del Niágara. En “Un canadiense en la meca del cine… ¡trash!” también nos acercamos a sus primeros pasos en el mundo cinematográfico y su talento para la construcción de maquetas y efectos especiales.
Cameron acabó convirtiéndose en un especialista en trabajar a contrarreloj con grandes resultados, así como demostrar su capacidad para embarcarse en diferentes proyectos simultáneamente, lo que le permitió ir ascendiendo y acercándose a otros puestos hasta conseguir los cargos de guionista y, posteriormente, director. A pesar de que sus exigencias y su trabajo estricto lo han tachado de alguien con quien es difícil trabajar consiguió ganarse a los estudios (especialmente a 20th Century Fox), y era capaz de convencerlos para que se embarcaran en proyectos millonarios.
El viaje por su filmografía continúa con los capítulos de “El agua”, donde encontramos con detalle ‘Piraña 2: Los vampiros del mar’, ‘Abyss’ y ‘Titanic’; “Viajando con Schwarzenegger”, en el que se hace hincapié en la amistad con el actor y político y se explora ‘Terminator’, ‘Terminator II: El día del juicio final’ y ‘Mentiras arriesgadas’; y termina su repaso como director cinematográfico con “Otros mundos”, donde ‘Aliens. El regreso’ y ‘Avatar’ (y sus futuras secuelas) son protagonistas.
La exploración por estas siguen un esquema en el que nos van informando sobre aspectos de la pre-producción, del rodaje y del resultado final, en todos los casos con información interesante.
El libro continúa con su labor como productor y guionista, así como un interesante apartado dedicado al interés de Cameron por los documentales. En ellos confluyen algunas de sus obsesiones como la religión (con afán de descubrir qué hay de verdad) y el cambio climático, o su pasión el mundo submarino (sería la primera persona en descender al lugar submarino más recóndito del planeta) y los pecios, especialmente el del Titanic. Desde que lo visitara por primera vez para rodar las imágenes con las que da comienzo su película sobre el transatlántico, totalmente verídicas, ha viajado en repetidas ocasiones con diferente tecnología para explorar más a fondo todos sus secretos.
Y es que otro de los aspectos claves que rodean a James Cameron es la tecnología y los avances que ha desarrollado para el séptimo arte. Desde las cámaras especiales que construyó para rodar esas imágenes submarinas del Titanic hasta cambiar la exhibición cinematográfica cuando el 3D de ‘Avatar’ llegó a los cines, además de incontables detalles técnicos que ha ido incorporando a su filmografía en la que se destacan portentos del campo de los efectos especiales. Su exploración en este terreno le llevó incluso a crear la empresa de FX Digital Domain, junto a los especialistas Stan Winston y Scott Ross. Este es quizá el tema que más se echa de menos en el libro, cuya exploración sobre la técnica y los efectos especiales de las películas de Cameron se antoja breve para la relevancia que tiene en la historia cinematográfica.
Sí que encontramos a lo largo del libro las idas y venidas románticas de Cameron, casado hasta en cinco ocasiones, en su mayoría con mujeres del sector. Detalles que en ocasiones se hacen redundantes, pues algunos son repetidos en distintos capítulos, mientras que otros aspectos más importantes en su carrera cuentan con menos matices.
La estructura del libro, dividido por temáticas, hace que el orden cronológico se acabe diluyendo, aunque el resultado final es interesante y no supone un problema para el lector. Para finalizar, el último capítulo nos cuenta los récords que ha ido cosechando a lo largo de su carrera, destacándose también sus grandes éxitos a pesar de su escasa filmografía.
El libro se cierra con un esquema de todos sus trabajos, que encontramos divididos en películas, documentales, series de televisión, cortometrajes y videoclip musical, así como subdivididos en los diferentes cargos que ha ocupado a lo largo de su filmografía. También aparecen mencionadas “en preparación” las cuatro secuelas de ‘Avatar’.
En el texto se adjuntan además algunos perfiles de técnicos y artistas que han sido relevantes para el director, de una forma u otra. En ellos encontramos al actor Bill Paxton, a la actriz Linda Hamilton, a los técnicos Russell Carpenter y Stan Winston, los compositores James Horner y Brad Fiedel y la productora Gale Anne Hurd, entre otros.
La maquetación es correcta, aunque contiene algunos errores, como que algunas fotografías no cuentan con pie de imagen o algunos párrafos se presentan en cursiva, cuando únicamente una palabra debería variar. Estos ejemplos, sumados a que en ocasiones algunas fechas se muestran erróneas, o faltan algunos signos de puntuación, dan la sensación de que el libro al completo no ha pasado por muchas revisiones. Sobre todo porque el primer capítulo termina de forma abrupta en medio de una frase y nos deja con la sensación de perdernos texto. Si lo que se pretendía era jugar con el final del capítulo y el inicio del siguiente no ha resultado muy efectivo.
Algo que se echa en falta en este título es la inclusión de las referencias bibliográficas utilizadas para escribirlo, así como el origen de las citas aparecidas. Solo en alguna ocasión se indica que las citas son de un “pressbook”, por ejemplo.
En definitiva un interesante volumen que repasa la carrera de James Cameron y aquellos aspectos que lo rodean. Aunque con algunos aspectos mejorables, hará las delicias de los seguidores del director, así como de aquellos interesados en el cine y su realización. Puede encontrarse a un precio de 23,95€.
Juan Luis Sánchez
Está programado como un Terminator para ver cine y series y analizarlo todo con su procesador neuronal un tanto desfasado de la época del Spectrum, pero que más o menos funciona (a ratos). Licenciado en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense de Madrid enviando pirañas voladoras con mal café a sus profesores para que le aprobasen. Aunque las publicaciones de papel se han hundido como el Titanic, trabajó en medios como diario Ya, Gaceta de los Negocios, Cinerama, Estrenos de cine, Estrenos de vídeo y Época y continúa colaborando en Mundo Cristiano, El Distrito y Gente. Posiblemente porque quizá utiliza varios avatares para multiplicarse, también tiene tiempo para ejercer como Secretario General del Círculo de Escritores Cinematográficos, y para escribir libros como ‘Audrey Hepburn, icono de la gran pantalla’ (ed. Jaguar). Antes que ver una película de Roland Emmerich preferiría incubar un alien en el estómago.
Luis Miguel Carmona
Ha escrito tantos libros de cine que a Skinet se le atragantaría procesar toda su información, entre ellos ‘Robert De Niro, de hombre a monstruo’, ‘Nombres de la banda sonora’ y ‘Un paseo por la alfombra roja’. Ha buceado por el abismo de los medios de comunicación, como guionista y actor en programas de TVE y Telecinco, como autor de relatos en Teleprograma, y colaborador de la Cadena SER de los programas ‘El club de los 7’ y ‘La ventana’. También ha sido crítico musical especializado en bandas sonoras en ‘Cinerama’, ‘Música de cine’, ‘Preview’, ‘Rosebud’, ‘Estrenos de vídeo’ y ‘deVideo’. Elegiría tragarse el ciclo completo de la filmografía de Raphael antes que sufrir diez minutos de cualquier cosa de Roland Emerich.
[note]
Un director que con ‘Titanic’ logró la película más taquillera de todos los tiempos, superándose con su siguiente obra, ‘Avatar’, presentada bajo el lema “Cameron reinventa el cine”. ¿Pero quién es realmente este peculiar cineasta?
En estas páginas descifraremos todas sus películas, así como su obsesión por los documentales, en uno de los cuales llegó a jugarse la vida al viajar a lo más profundo del océano. Analizamos su compleja vida sentimental, así como su preocupación por el medio ambiente y su condición de estricto vegano.
Que los actores le odien por cómo les trata en los rodajes, que ponga de los nervios a sus productores por el dinero gastado, y que alguien intentase envenenarle es lo de menos. Lo mejor es que su megalomanía le ha hecho entrar en el olimpo cinematográfico.
No sabemos si de verdad ha reinventado el cine, pero en este libro los autores reinventan a Cameron.[/note]
