‘Puertadeluz‘. Un nombre tan brillante como irónico es el que nos trae Luis Bustos en su nueva propuesta como autor completo, ya que desde el principio el título contrasta con una portada sombría, el primer plano de un rostro triste en riguroso blanco y negro. Y es que Puertadeluz es un sueño convertido en pesadilla, un proyecto surgido en plena burbuja inmobiliaria que termina abandonado (seguro que esto os suena) y en consecuencia, habitado por parias y marginados.
En este thriller, Bustos nos plantea una historia situada en el futuro, pero inquietantemente realista. España, año 2026: el país está en plena crisis tanto a nivel político como económico, y la caída de la burbuja inmobiliaria ha dejado proyectos de construcción sin terminar, cadáveres de hormigón que se convierten en testigos impasibles de la violencia y la decadencia de la sociedad. Puertadeluz es una de estas urbanizaciones abandonadas y desprovistas de servicios, y en ella viven los protagonistas: la adolescente Alicia, su padre y su hermano.
Nuestra Alicia, igual que la de Carroll, es rebelde, curiosa e impusiva. Y también al igual que la clásica, con la que encontraremos más de un paralelismo, Alicia descubrirá algo que hará que se vea envuelta en una serie de sucesos inesperados. Su padre, un superviviente que muestra su lado más duro para no dejarse vencer por las circunstancias, y su hermano pequeño, aún bastante inocente, funcionan perfectamente como secundarios en la historia.
La narrativa de Bustos es impecable y lleva la trama con buen pulso hasta el final. El thriller mantiene la tensión y el interés en la historia, dosificando de forma muy inteligente la información que se nos da y la que se nos oculta, y acelerando el ritmo en la última parte. Sabe desconcertarnos en los momentos precisos y alcanza un final coherente pero abierto. De fondo, nunca planteada directamente, está presente la crítica política y social. La trama y los protagonistas son prioritarios, y la crisis es simplemente un contexto, un elemento de fondo, pero la reflexión sobre a dónde nos lleva el capitalismo salvaje de nuestra sociedad actual resulta inevitable.
El dibujo sigue en la misma línea que sus obras anteriores: sus trabajos como autor completo ‘Versus‘ y ‘Endurance‘, o ‘¡García!‘, la fantástica obra que produjo junto a Santiago García. Hay influencias del cómic americano, pero también del manga, y Bustos sabe ser él mismo por encima de cualquier influencia. Una buena caracterización de personajes, un trazo preciso en las tramas en blanco y negro y la representación, a veces visceral, de las emociones de sus protagonistas, son sus señas de identidad. Las viñetas son dinámicas y con el mismo ritmo que el argumento. Las sombras y claroscuros se convierten en un elemento fundamental de la atmósfera angustiosa, y están presentes no solo en los fondos sino también en los rostros de los personajes.
Bustos ha reconocido en varias ocasiones la influencia de J.G. Ballard, el autor británico que describió distopías en obras como ‘El mundo sumergido‘ o ‘Rascacielos‘ y que usó la ciencia ficción para describir la sociedad post-industrial y analizar el comportamiento humano. Como él, sitúa en primer plano un drama familiar, una disección de la personalidad de los protagonistas sometidos a un entorno agobiante que no les deja salida. Tras ellos, un escenario decadente que también roba protagonismo a la historia, con escenas de gran fuerza visual como los vistazos al centro comercial destrozado y abandonado.
Astiberri edita ‘Puertadeluz’ en un tomo de 128 páginas en cartoné. Lo incluye dentro de su colección de novela gráfica denominada Sillón Orejero, y tiene un precio de venta de 16 euros. Una obra que plantea una perspectiva tan terrible como lúcida, y que nos da la misma dosis de ciencia ficción que de realidad. Absolutamente recomendable.
Luis Bustos
Dibujante de cómics, ilustrador y grafista, nacido en Madrid en 1973. Comienza su carrera en 1996 con ‘Rayos y centellas’ (Camaleón Ediciones), junto al guionista David Muñoz. De un estilo gráfico versátil, ha realizado trabajos en varios géneros y formatos que van desde el comic book, el álbum europeo, el humor para prensa o la novela gráfica. Como autor completo destacan ‘Endurance’ (Planeta DeAgostini, 2009), un relato de aventuras sobre la expedición antártica de Ernest Shackleton; el cómic juvenil ‘Zorgo’ (Dibbuks, 2012) o ‘Versus’ (Entrecómics Cómics, 2014), adaptación libre del relato de Jack London ‘Por un bistec’. También ha colaborado en el semanario humorístico El Jueves (2012-2014) y actualmente en la revista digital Orgullo y Satisfacción. Otros trabajos como dibujante son ‘Residuos’ (Glénat, 2005), junto a David Muñoz y Antonio Trashorras, o ‘¡Infiernos!’ (¡Caramba!, 2015), con guion de John Tones y con Santiago García ha realizado los dos tomos de los que consta, por ahora, ‘¡García!’
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Puertadeluz
Luis Bustos
128 páginas. Blanco y negro
Cartoné. 17 x 24 cm
Año de publicación: 2017
1ª edición
Sillón Orejero
Los vecinos de Puertadeluz, una urbanización de las surgidas al amparo de la burbuja inmobiliaria, procuran vivir el día a día con la falta de servicios, el desinterés del Gobierno central y el peligro creciente de las bandas criminales nómadas que asolan las carreteras. Es ahí donde vive Alicia, una adolescente de 14 años, junto con su hermano y su padre. En una de sus incursiones por la denominada “zona fantasma”, que no es sino una parte de la ciudad abandonada en mayor medida a causa de las obras no finalizadas, descubrirá una misteriosa caja encaminada a desencadenar una espiral de sucesos que afectarán de pleno a la comunidad.
Este planteamiento que propone Luis Bustos en su nueva obra larga como autor completo tras los dos tomos de ¡García! (Astiberri, 2015 y 2016) realizados junto a Santiago García, le permite firmar un thriller futurista reflejo de un modelo sociopolítico en crisis, en el que se perciben referencias tanto a J. G. Ballard como a la película Sólo ante el peligro.
Para Mireia Pérez, autora de cómics y librera, con Puertadeluz, una obra que “transcurre en el extremo distópico de una realidad que ya es hostil: las sociedades arrasadas por la violencia inmobiliaria, Luis Bustos consigue evidenciar que tanto la desobediencia como la empatía son claves para nuestra propia supervivencia”.
“Una cercana distopía que Luis Bustos resuelve con estilo, profesionalidad, claridad (y clarividencia) narrativa”.
David Aja
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