Según ha publicado CNBC, Disney habría entablado conversaciones con 21st Century Fox sobre la adquisición de la mayor parte de sus activos en una operación que, de llevarse a cabo, dejaría a la Fox centrada casi exclusivamente en deportes y noticias. La operación, que incluiría las divisiones de cine y televisión, implicaría que ‘Star Wars: Una nueva esperanza‘ pasaría a ser propiedad oficial de Lucasfilm / Disney. También significaría que cada una de las principales propiedades de Marvel Comics que posee la Fox -incluyendo a los X-Men, 4 Fantásticos y Deadpool– potencialmente estarían bajo el paraguas de Marvel Studios, abriendo la puerta para combinar estos personajes y universos con el Universo Cinematográfico Marvel.
Las negociaciones llegan en un momento crucial, ya que Disney está preparando un producto de streaming para rivalizar con Netflix y podría utilizar el contenido de cine y televisión de Fox para hacerlo. Por su parte, desde la Fox han mostrado interés en adquirir el servicio europeo de televisión por satélite Sky, que le ayudaría a distribuir noticias y deportes, junto con el resto de contenidos.
Disney, de hecho, está retirando gradualmente su contenido de la marca Pixar y Disney de Netflix para que los consumidores que quieran ver esos programas y películas tengan incentivos para suscribirse al próximo servicio de Disney, que también incluirá producciones de Marvel y Star Wars y posiblemente podría añadir películas y programas de Fox en una fecha posterior.
Para Fox, un acuerdo de este tipo le serviría para centrarse en noticias y deportes, un mercado más predecible que el de la producción audiovisual donde la competencia repentinamente incluyendo a grandes empresas digitales como Amazon, Facebook, Google y Netflix. Estas compañías están cambiando la forma en que la gente consume los medios de comunicación y dominan la distribución digital de los contenidos de vídeo digital. Los directivos de la Fox creen que para competir en ese paisaje cambiante se requiere la infraestructura que tiene Disney, pero no 21st Century Fox.
La directiva de la Fox tiene la convicción de que no pueden competir con la escala mediática de otros estudios, y que Disney tiene el tamaño necesario para llevar sus producciones cinematográficas y televisivas a nuevas metas. Pero 21st Century Fox no vendería toda su compañía. Vendiendo sus propiedades de cine y televisión, el estudio mantendría un enfoque muy centrado en noticias y deportes. Puesto que, en Estados Unidos, una misma compañía no puede poseer dos cadenas de radiodifusión, Fox permanecería bajo el control/articulación de 21st Century Fox, al igual que la programación deportiva de Fox ya que Disney cree que unir fuerzas entre ESPN y Fox Sports podría ser visto como anticompetitivo desde un punto de vista antimonopolio. El mismo razonamiento se relaciona con su decisión de no comprar Fox News o Fox Business, que también permanecerían con 21st Century Fox.
Pero Disney sería dueña del estudio de cine, la producción televisiva y los activos internacionales, y cadenas como FX y National Geographic. Desde el punto de vista del consumidor, las implicaciones en terreno cinematográfico son las de mayor peso en la operación. Fox ha hecho un gran trabajo durante los últimos años con la construcción de su propio universo Marvel con películas arriesgadas como ‘Logan‘ y las próximas ‘Los Nuevos Mutantes‘, ‘Deadpool 2‘ y ‘X-Force‘. Sin duda, solo el hecho de plantearse cómo encajarlas dentro del Universo Cinematográfico Marvel provocaría grandes quebraderos de cabeza, así que es posible que Disney las mantenga separadas por ahora mientras permite a Marvel Studios incorporar propiedades como 4 Fantásticos dentro del UCM.
Los detalles del acuerdo o el precio que se ha discutido no se ha dado a conocer. Dado que implicaría la venta de muchas, pero no todas las propiedades de la Fox, no está claro cómo la compañía mitigaría las posibles consecuencias fiscales de un acuerdo. Por otro lado, The Wall Street Journal confirma que han existido dichas negociaciones pero que se han venido abajo al no llegar a un acuerdo por el precio de compra. Por el momento no hay confirmación ni desmentido oficial por parte de Disney o Fox.
