Hace unas semanas os hablamos de ‘La caída del Caballero Oscuro‘, mítica saga protagonizada por Batman. En esta reciente primera entrega, conocimos a Bane, el terrible villano encargado de llevar al protector de Gotham al límite físico y mental. Batman encontraba en Bane una especie de reverso oscuro de sí mismo. Ambos habían llegado a un punto de perfección que roza lo sobrehumano. La diferencia es que Bane no se conformó con las fronteras de la biología, y encontró una forma de atravesar los límites gracias a una droga experimental, Veneno, que dotaba al consumidor de una fuerza por encima de lo normal.
Resulta que esta droga no era una novedad en el universo de Batman. Poco tiempo antes, el propio Caballero Oscuro fue víctima de los efectos de Veneno. Este episodio entra en el escaso grupo de historias en las que el usualmente inquebrantable Batman pierde el control y se transforma en una sombra del héroe.
La trama de ‘Veneno’ comienza de manera impactante. Batman no puede impedir la muerte de una niña, y entra en un profundo pozo de culpa. Incluso un hombre que ha llegado a la práctica perfección física tiene límites, y su fuerza no basta para rescatar a la pequeña. En ese estado, entra en contacto con el padre de la niña, un científico que investiga con una droga que puede llevar al campeón de Gotham a un nuevo nivel. El problema es que, como siempre, el poder no es gratis, y las píldoras desarrolladas por este ejemplo de doctor loco poseen una enorme capacidad de adicción.
Batman se transforma en una máquina imparable de destrozar mandíbulas, al borde de la locura, sometido a los efectos de Veneno. Tras su caída hay una oscura conspiración, cuyos participantes pretenden usar la potente droga para crear un ejército de supersoldados adictos y manejables. Batman es un conejillo de indias que se precipita al abismo tras cada consumo de las píldoras que le han alejado de todos los principios que sustentan la cruzada aceptada tras la muerte de sus padres.
El auténtico punto fuerte de ‘Veneno’ es el doloroso camino de Batman, desde la frustración que da inicio a su descenso a los infiernos al agridulce final donde nuestro héroe sale triunfante, por supuesto, pero a un precio demasiado alto. No es común ver a un obseso del control como el Caballero Oscuro fuera de quicio, reducido a una fuerza de la naturaleza en pleno delirio de poder. El analítico detective desaparece y la escalofriante sonrisa que luce en la portada de este volumen se convierte en su seña de identidad. Pero tras la fuerza bruta, Batman es un patético pelele esclavo de su adicción.
Pocos han sido capaces de quebrar la indomable voluntad de Batman. El momento más conocido del Caballero Oscuro despojado de voluntad quizá sea el arco argumental conocido como ‘La Secta’, donde el diácono Blackfire reducía a mero títere al héroe encapuchado. La acción del Veneno destruye el entorno de Burce Wayne. Aleja de la realidad al cruzado, e incluso el siempre fiel Alfred encuentra dificultades para seguir justificando el oscuro sendero recorrido por Batman en esta aventura.
Por supuesto, como no puede ser de otra forma, tras la caída en el pozo más profundo llega el episodio de redención. Algunas de las imágenes más potentes de ‘Veneno’ son las relacionadas con el final del largo recorrido por la adicción sufrido por Batman, y vemos el dificil resurgir del héroe. Cobra sentido la esencia de la historia presentada por Dennis O´Neil, en la que pretendía mostrar a un héroe capaz de caer, mostrar debilidad, pero también la fuerza interior para sobreponerse. El frío detective resulta que esconde un ser humano tras la máscara. O´Neil nos recuerda que Batman también es falible, y esa es la fuerza de la historia, que culmina con el final del segundo acto, con Bruce Wayne arrastrándose fuera de la cueva, casi convertido en un despojo.
Dennis O´Neil es una de las personas que mejor conoce al personaje principal de la función. Como autor llevó a cabo junto a Neal Adams la profunda transformación que modernizó a Batman, y, como editor, ha sido el encargado de coordinar sagas inolvidables como la citada ‘La caída del Caballero Oscuro’. Toda una leyenda al frente de una historia que, me temo, ha quedado sepultada por la importancia de los hechos posteriores relacionados con lo que en este tomo acontece. En mi opinión, es un error la reducción de esta trama a una especie de precuela de la saga de Bane, porque tiene identidad y peso por sí misma de sobra. Sí, es cierto que muchos elementos clave de la mitología del murciélago que aparecen de aquí tienen su eclosión posteriormente. Pero ‘Veneno’ está más allá de la primera aparición de la famosa droga,o que escenarios tan visitados como Santa Prisca son introducidos en el universo del murciélago en este puñado de números.
‘Veneno’ tampoco era la primera vez que el reconocido guionista hablaba sobre el infierno de la adicción. Sacudió los pilares de la industria con la potente etapa al frente de Green Arrow/Green Lantern al lanzar al joven pupilo del arquero, Speedy, a los brazos de la droga.
Al dibujo, contamos con la colaboración entre Trevor Von Eeden y Russel Braun. Estilo sobrio y elegante, con especial predilección por los planos cercanos y el protagonismo de los rostros. En ocasiones puede resultar un tanto estático, pero el resultado es más que convincente. Los cambios de escenarios, desde las calles de Gotham a la tropical Santa Prisca, podrían caer en el desequilibrio, pero los artistas mantienen el pulso a los distintos tonos propuestos por O´Neil. Buen trabajo que luce bastante consistente a pesar de los años pasados desde su publicación original. Mención especial a las geniales portadas en manos de un clásico de DC, José Luis García López.
‘Veneno’ apareció en el contexto de ‘Legends of the Dark Knight’, colección que en sus origen estaba destinada a contar historias encuadradas en los años de formación del justiciero protagonista. Sin duda, ‘Veneno’ es otro de los grandes momentos que dejó aquella colección, con arcos tan reconocidos como ‘Gótico’ en su haber.
‘Veneno’ se engloba dentro de la línea de ECC dedicada a grandes autores de Batman. En este caso, el protagonista es Dennis O´Neil. Recopila los números del 16 al 20 de Legend of the Dark Knight, publicados originalmente en 1991. Encuadernado en tapa dura, lo podrás encontrar en tu librería favorita al precio de 15,95 euros.
Dennis O´Neil
Nacido en St. Louis, Misuri, en 1939. Se trata de un escritor y editor de cómics que se convirtió en un nombre imprescindible de la DC de los años 70 gracias a sus celebradas etapas en ‘Green Lantern / Green Arrow’, ‘Wonder Woman’, ‘Supermany’, ‘Batman’ y ‘Detective Comics’, donde entre otras proezas, creó al personaje de Ra’s al Ghul, villano esencial del Caballero Oscuro. A mediados de la década siguiente, emprendió una larga etapa como editor de los títulos de Batman que duró 15 años en la que volvió a sacar a la palestra su habilidad como detective largo tiempo olvidada y de la que surgieron hitos como ‘Una muerte en la familia’, ‘Tierra de nadie’ o ‘La caída del murciélago’. Entre muchos otros premios, fue nominado en cuatro ocasiones a los premios Haxtur, habiéndolo ganado en dos de ellas.
[note]Batman tropieza con una droga que le permite superar sus limitaciones físicas. Es un esteroide que le brinda una fuerza sobrehumana, pero reduce su inteligencia y lo somete al tormento de un síndrome de abstinencia brutal. Para librarse del influjo de la droga y detener a quienes la producen, el Caballero Oscuro emprenderá un viaje lleno de peligros a la isla de Santa Prisca.
Este volumen contiene los episodios 16 a 20 de Legends of the Dark Knight, publicados entre los meses de marzo y junio de 1991. En esta obra, el legendario guionista Dennis O’Neil se alió con los dibujantes Trevor von Eeden, Russell Braun y el mítico José Luis García-Lópezpara dar forma a un arco argumental memorable que preludió la célebre saga Knightfall.[/note]