En 1952, gracias al escritor e ilustrador Osamu Tezuka, creador de grandes personajes del mundo de la ficción japonesa, dio comienzo la publicación del manga, cuyo título, traducido literalmente al español, es Átomo, el brazo poderoso (aunque fuera del país nipón siempre ha sido conocido como Astro Boy, nombre que gustó tanto a su creador que también acabó por aceptarlo en el idioma original). La colección, cuyo protagonista ya había aparecido como secundario en otra publicación manga, se mantuvo a la venta hasta 1968, con un total de 23 volúmenes. Al igual que ha pasado con otros cómics japoneses, Astro Boy logró la aceptación necesaria para dar el salto a la pequeña pantalla en diversas series de animación, siendo en blanco y negro la primera de ellas. Por fin, en el año 2009, vio la luz la adaptación fílmica del manga, compuesta por una mezcla del género de superhéroes con la acción y la comedia, cuyo análisis puedes leer a continuación:
Bajo la dirección de David Bowers, Astro Boy es una película de dibujos animados realizada completamente por ordenador, con un presupuesto total de 65 millones de dólares, que cuenta con 93 minutos de duración.
La historia transcurre en una versión futurista del año 2003 (no debemos olvidar que la idea original de Osamu Tezuka data de 1952), en la ciudad flotante llamada Metro City, en la que humanos y robots conviven en armonía, aunque los segundos se encuentran bajo el control de los primeros. Todo comienza cuando el doctor Tenma sufre un duro golpe por la pérdida de vida de su inteligente hijo Tobio en un accidente de laboratorio. Sin embargo, en lugar de sumirse en el dolor, decide construir un robot con la misma apariencia física y recuerdos que tenía el niño, sin darle a conocer el hecho de que no es un ser humano. No obstante, el pequeño no tarda en darse cuenta de que no es una persona normal, ya que posee poderes especiales, como visión de rayos X, super oído, cohetes en brazos y piernas, 100000 caballos de potencia y armas ocultas en su trasero. Desgraciadamente, el doctor Tenma, que se da cuenta de que el robot nunca podrá reemplazar a su hijo fallecido, termina por repudiarlo, lo que obliga al pequeño a ir en busca de un sitio en el que pueda encajar tal y como es.
Tras muchas peripecias, el filme Astro Boy acaba con el inicio de un combate entre el protagonista y un invasor alienígena. Al no quedar resuelta dicha contienda, podría pensarse que se estuviera tanteando la posibilidad de llevar a cabo el rodaje de una secuela. No obstante, nunca se grabó una segunda parte y, personalmente, creo que esa no fue nunca la intención, a pesar del final abierto.
Al tratarse de una adaptación bastante libre, existen algunas diferencias fáciles de identificar entre la historia original y lo que se nos narra en la película, como es el caso del motivo de la muerte de Tobio. Además, en esta ocasión, la versión fílmica altera significativamente a algunos personajes, con el fin de darles mayor complejidad que la que muestran en el cómic. Otro cambio significativo es el hecho de que la película se permite la licencia de añadir personajes nuevos, que nunca habían aparecido en el manga. Sin embargo, lo que no parece variar es el mensaje que se quiere transmitir, porque el protagonista, como buen superhéroe, defiende la paz y la justicia, pero también los derechos de los robots, ya que opina que todos debemos ser tratados como iguales. No queda nada más que decir al respecto, ya que opino que es innecesario aclarar dicha metáfora.
Entre las influencias que llevaron a Osamu Tezuka a crear a Astro Boy, destaca la película Pinocho (1940), realizada por Disney. De hecho, fue la compañía del ratón la primera en popularizar los personajes de animación con grandes ojos, algo que parece ser que no solo le gustó mucho a Osamu Tezuka, sino que además sentó las bases de dicha característica para los personajes nipones de ficción desde entonces en adelante.
Por su parte, el director David Bowers, que coincide en algún punto con el creador del personaje, como se puede comprobar en sus declaraciones, se expresa de la siguiente manera:
Astro boy es una historia atemporal como Pinocho u Oliver Twist. Es muy dickensiana, pero también es muy moderna. Astro boy es un niño que ha sido creado para sustituir al hijo que ha perdido su padre, pero el padre se da cuenta de que su creación realmente no puede sustituir a su malogrado hijo. El chico, que creía que era un niño humano, se entera de que es un robot, y a partir de ahí su vida queda patas arriba.
Al echar la vista atrás y pensar en las películas que más me han gustado e influenciado, me he dado cuenta de que el primer filme que vi en cine fue Pinocho. Mi padre me llevó a verla y me afectó muchísimo. A día de hoy todavía me pongo a llorar si escucho la canción When You Wish Upon a Star.
Si ya eras fan de la publicación original o de las múltiples series de animacíón, es muy posible que también lo pases bien con esta adaptación cinematográfica de Astro Boy, la cual, pese a ser de dibujos, es perfectamente disfrutable tanto para niños como para adultos. No obstante, si este producto te sabe a poco, se lleva especulando con una película de actores reales desde el 2015. Sin embargo, a día de hoy, el proyecto no parece haber despegado.