El día 7 de este mes llegó a los cines la última entrega de la saga mutante, y por lo que parece el fénix no ha llegado muy lejos en su primer fin de semana. Las noticias que llegaban de X-Men: Fénix Oscura no eran nada esperanzadoras, e incluso desde la directiva de Fox se insinuó que a partir de la compra de la compañía por parte de Disney sus directivos abandonaron el proyecto. Sea como fuere la cinta protagonizada por Sophie Turner llegó a la gran pantalla y sus cifras el fin de semana de su estreno no son nada positivas.
En la taquilla americana la película ha sido superada en recaudación por la segunda entrega de La vida secreta de tus mascotas, que ha recaudado 47 millones de dólares. En cambio, la nueva entrega mutante ha recaudado 33 millones, siendo la película de la franquicia X-Men que menos ha recaudado en la historia. Unos números muy bajos, que hacen que la película de Simon Kinberg se corone con el dudoso honor que ostentaba hasta ahora Lobezno Inmortal de 2013. Mala aceptación para la cinta que cierra los 19 años de la franquicia mutante en manos de Fox, de cara a reiniciarse ya dentro del Universo Cinematográfico Marvel.
Aparte de los números, la crítica tanto de los fans como de los medios tampoco ha sido especialmente positiva. En portales de referencia como Rotten Tomatoes la cinta ha obtenido un 26% de la crítica especializada. Malas cifras para un fin de semana de estreno, habrá que esperar para ver si el Fénix resurge de las cenizas de este débil estreno y alza el vuelo.