Spider-Man: Lejos de casa ha batido varios récords durante esta semana en Estados Unidos, entre los que se incluyen la mayor venta de entradas de todos los tiempos en un martes (38 millones de dólares), los mejores ingresos brutos de un miércoles para una película de Marvel (27 millones de dólares) y la segunda mayor recaudación durante las celebraciones del 4 de julio (25 millones de dólares). También supone el mejor estreno de Sony Pictures con 185 millones de dólares, aunque hay que tener en cuenta que en esta ocasión se trata de la taquilla acumulada de seis días, según cifras publicadas por Box Office Mojo.
Eso ha reventado las mejores expectativas de los analistas. En principio, Spider-Man: Lejos de casa tenía una previsión de 125 millones de dólares de martes a domingo, según Sony, que coprodujo la película de superhéroes con Marvel Studios. La película ha acabado superando los 580 millones de dólares en todo el mundo en sus primeros días de estreno. El gran comienzo del trepamuros es una gran noticia para Hollywood, ya que la temporada estival de estrenos necesita desesperadamente una victoria tras el fiasco de X-Men: Fénix Oscura y la baja aceptación de otras películas como Men In Black: International o Godzilla: Rey de los monstruos.
Aunque las impresionantes cifras son sin duda un alivio para Sony, que ha invertido un presupuesto estimado de 160 millones de dólares en el proyecto, sigue estando por debajo del debut de Spider-Man: Homecoming en 2017, que había recaudado 117 millones de dólares en el mismo periodo de tiempo. En lo que respecta a la franquicia arácnida, la taquilla del primer día de la segunda película protagonizada por Tom Holland como Spider-Man se sitúa por encima de las dos de Andrew Garfield (The Amazing Spider-Man con 62 millones y su secuela con 91) y por debajo de dos de las tres de Tobey Maguire (aunque supera al estreno de Spider-Man 2 por 5 millones de dólares).