En este artículo nos centraremos en una de las versiones fílmicas más famosa de la tercera novela, conocida bajo el título de El hombre de la máscara de hierro (1998), que comienza con la siguiente declaración:
Parte de esta historia es leyenda. Sin embargo, esto sí es verdad. Cuando los ciudadanos de Francia sublevados destruyeron la Bastilla, descubrieron en sus archivos esta misteriosa entrada: “Prisionero número 64389000 — el Hombre de la Máscara de Hierro“.
Bajo la dirección de Randall Wallace, esta película, de 132 minutos de duración, esta protagonizada por Leonardo DiCaprio (como el rey Luis XIV y como Philippe), Gabriel Byrne (en el papel de D’artagnan), Jeremy Irons (que interpreta a Aramis), John Malkovich (que encarna a Athos), Gérad Depardieu (que se mete en la piel de Porthos), Anne Parillaud (que hace de reina Ana de Austria), Judith Godrèche (que hace de Christine Bellefort), Peter Sarsgaard (como Raoul), Edward Atterton (en el papel de teniente Andre) y Hugh Laurie y David Lowe (que interpretan a dos consejeros reales).
Ha pasado mucho tiempo desde que los planes de cardenal Richelieu fuesen desbaratados por los mosqueteros. Los célebres Aramis, Porthos y Athos ya se han retirado del servicio, mientras que D’artagnan sigue en activo como capitán de la guardia y principal defensor del rey Luis XIV. El problema es que el monarca es un auténtico tirano que mata de hambre a su pueblo y utiliza a las mujeres como meros objetos sexuales. La situación se vuelve más comprometida cuando el gobernante manda a Raoul, hijo de Athos, a morir en la guerra, por estar encaprichado de su novia Christine. Aramis, Porthos y el padre del difunto deciden pasar a la acción y suplantar al monarca por su hermano gemelo Philippe, que lleva años encarcelado en una remota prisión, con el rostro escondido tras una máscara de hierro. El problema es que no cuentan con el respaldo de D’artagnan, que quiere mantenerse fiel a su promesa de defender la integridad del rey a toda costa.
La película finaliza con esta conclusión:
El prisionero de la máscara de hierro jamás fue encontrado. Se decía entre los carceleros que había recibido un indulto real y que había sido llevado al campo, donde vivía discretamente, visitado a menudo por la reina. El rey conocido como Luis XIV trajó a su pueblo comida, prosperidad y paz. Y se le recuerda como el gobernante más grande de la historia de su nación.
Aunque hay que reconocer que El hombre de la máscara de hierro cuenta en su reparto con una buena cantidad de actores de renombre, gran parte de su peso recae en Leonardo DiCaprio, ya que se encargó de interpretar a dos personajes que, pese a ser hermanos gemelos, no podían tener una personalidad más distinta. Además, su elección como protagonista del filme tuvo mucho peso en lo que a afluencia de público se refiere, sobre todo en el sector femenino y joven.
Resulta curioso el hecho de que, en efecto, el rey Luis XIV sí tuvo un hermano llamado Felipe, el cual era abiertamente homosexual, pero no hay que confundirlo con el Philippe del filme. De hecho, ambos aparecen en la novela, mientras que en la película se prescindió del personaje histórico para que el público no se sintiera confuso al contar con dos personas que tuvieran el mismo nombre.
Como hemos relatado al principio de este artículo, está más que claro que, en aquella época, existió un prisionero conocido como el hombre de la máscara de hierro, pero no hay nada que arroje luz sobre el hecho de que se tratase de un hermano gemelo de Luis XIV. De hecho, una de las teorías con mayor peso, defendida por el historiador inglés Roger McDonald, declara que el auténtico preso era Charles de Batz-Castelmore D’artagnan, capitán de la guardia de los mosqueteros, en el que está basado el personaje creado por Alejandro Dumas.
Si eres fan de las obras literarias del escritor francés y, sobre todo, de sus aventuras protagonizadas por los mosqueteros, no cabe la menor duda de que disfrutarás con El hombre de la máscara de hierro, una película que te transportará hasta el 1662, año en el que transcurre dicha aventura.
Existen otras versiones cinematográficas sobre esta novela, como las diversas versiones existentes bajo el título de La máscara de hierro o el filme El quinto mosquetero (1979), pero ninguna de ellas ha logrado alcanzar cotas de éxito tan grandes como la adaptación que analiza este artículo.