El Llanero Solitario (I y II)
El escritor estadounidense Fran Striker creó al personaje del Llanero Solitario en 1933, como protagonista de un programa de radio de bastante éxito. Pese a la soledad que implica su nombre, este justiciero enmascarado, cuyo verdadero nombre es John Reid, siempre iba acompañado de su fiel caballo Silver y su amigo indio, conocido como Tonto (en ocasiones traducido como Toro, dado lo insultante que resulta el otro nombre en nuestro idioma).
Versiones animadas aparte, son tres los actores que han dado vida al Llanero Solitario: Clayton Moore, Klinton Splisbury y Armie Hammer. Sin embargo, en esta ocasión, nos centraremos en el primero, ya que, además de protagonizar una exitosa serie de televisión homónima, que vio la luz entre 1949 y 1957, también dio vida al personaje en dos películas, de las que puedes leer el análisis a continuación:
El Llanero Solitario (1956)
Cuando las fábricas empezaron a echar el humo sobre las ciudades y las tierras de cultivo ofrecían una vida pobre, los americanos giraron sus carros hacia el oeste. Exploraron nuevos territorios, miles de ellos, llevando consigo sus pertenencias, cruzando los ríos y escalando montañas, luchando contra los indios y proscritos, rezando, viviendo, muriendo. Era una tierra dura, una tierra hostil, solo los fuertes sobrevivían. El nacimiento de nuevos americanos: los pioneros. En este valle, en estas tierras, existió un hombre que se convirtió en leyenda, un hombre que luchaba contra la opresión. Su cara enmascarada es aún desconocida. Cabalgaba por el Oeste con un caballo blanco plateado. Aparecía de la nada para golpear a la injusticia o a los fugitivos. Luego, se iba tan misteriosamente como venía. Su señal era una bala de plata. Se llamaba El Llanero Solitario.
Este párrafo sirve de introducción a la película, de 86 minutos de duración, dirigida por Stuart Heisler y protagonizada por Clayton Moore (como el Llanero Solitario), Jay Silverheels (en el papel de Toro), Robert J. Wike (que interpreta a Cassidy), Michael Ansara (que encarna a Caballo Furioso), John Pickard (que da vida al sheriff Sam Kimberley), Lyle Bettger (que se mete en la piel de Reece Kilgore) y Perry López (que hace de Pete Ramírez).
Acompañado por una temible banda de forajidos, el ranchero Reece Kilgore se apodera por la fuerza de unas tierras indígenas que no lo pertenecen. El Llanero Solitario y su amigo Toro deben intervenir si quieren impedir que la codicia del malvado Reece Kilgore desate una guerra contra el pueblo indio.
El filme no duda a la hora de hacer una denuncia social sobre los abusos que, en aquella época, se cometían contra los indios, a los que muchos consideraban como seres sin derechos, lo cual queda bien remarcado al estar protagonizado por un personaje de cada facción que son grandes amigos.
Sin duda, El Llanero Solitario no es una película indicada solo para los seguidores del personaje, sino para todos los amante del género, que no tendrán ningún problema en ver colmadas sus expectativas.
El éxito obtenido por la serie homónima sirvió de trampolín para que esta película calase lo suficiente entre los aficionados como para tomar la iniciativa de llevar a cabo una secuela.
El Llanero Solitario y la ciudad perdida de oro (1958)
En este filme, de 81 minutos de duración, Lesley Selander se sienta en la silla del director, mientras que Clayton Moore y Jay Silverheels repiten en sus papeles de Llanero Solitario y Tonto. Junto a ellos destacan Douglas Kennedy (como Ross Brady), Charles Watts (en el papel del sheriff Óscar Matthinson), Noreen Nash (que interpreta a la señora Henderson), Ralph Moody (que encarna al padre Esteban), Lisa Montell (que da vida a Paviva), John Miljan (que se mete en la piel del Jefe Tomache), Dean Fredericks (que hace del doctor James Rolfe), Maurice Jara (que se convierte en Redbird), Lane Bradford (como Wilson) y William Henry (en el papel de Travers).
Una banda de forajidos encapuchados ha matado a tres indios y se han llevado sus medallones de plata, ya que, según dice la leyenda, quien consiga reunir cinco colgantes específicos podrá encontrar la ciudad perdida de oro. Con la intención de evitar que haya más muertes, el Llanero Solitario y Tonto deciden mediar en el asunto.
Resulta bastante curioso que, en esta película, el nombre del compañero del Llanero Solitario sí sea traducido a nuestro idioma como Tonto, en lugar de Toro, sobre todo si tenemos en cuenta que se trata de una secuela del filme anterior.
Otro dato a tener en cuenta es que, al inicio del largometraje, se muestran unas rápidas secuencias de cómo se conocieron los dos protagonistas, algo que hubiera sido mucho más lógico que nos lo hubieran enseñado en la primera entrega.
Por supuesto, al igual que sucede en la entrega anterior, en El Llanero Solitario y la ciudad perdida de oro se sigue criticando el abusivo trato de los vaqueros contra los indios.
Se trata sin duda de una más que correcta continuación de la primera película, ya que Clayton Moore siempre se sintió cómodo interpretando al Llanero Solitario, con el que siguió relacionado hasta que, en 1979, se vio obligado judicialmente a abandonar el personaje.