En el año 2000, el ilusionista Uri Geller le exigía a Nintendo 60 millones de libras asegurando que Kadabra le parodiaba sin autorización. En la acusación, Geller incluía que el pokémon, además de tener un nombre en japones (Yungeraa) muy parecido al suyo, contenía en simbología nazi.
Por su parte, Nintendo reconoció inspirarse en Geller para diseñar a Kadabra, pero nego rotundamente que el diseño tuviese simbología fascista. Geller ganó la demanda y desde entonces Kadabra no ha aparecido en las expansiones del juego de cartas y solo ha tenido un breve cameo en el anime, con Masamitsu Hida, director del anime en 2003, asegurando que Kadabra no volvería a aparecer hasta que llegaran a un acuerdo con Geller.
Ahora, a través de una publicación en Twitter, el ilusonista se ha disculpado por su comportamiento de hace 20 años, añadiendo que ha levantado la prohibición que impedía a Nintendo imprimir cartas de Kadabra. De momento ni Nintendo ni The Pokémon Company se han pronunciado al respecto, pero no sería extraño ver el regreso de este pokémon al juego de cartas dentro de poco.
