En 2011 surgía en internet la idea de dotar a la ciudad de Detroir con una estatua de Robocop, ya que, si Filadelfia contaba con una de Rocky, el policía cyborg patearía el culo del boxeador. Así, aunque en aquellos tiempos las campañas de financiación no tenian tanto impacto como ahora, no tardaron en conseguir 65.000 dólares para el proyecto, que llevaría a cabo Venus Bronze Works.
Tras varios retrasos que posicionaron el inicio del trabajo en la escultura en 2014, Giorgio Gikas, escultor principal de este proyecto, era diagnosticado con cancer, lo que volvía a retrasar la escultura. Afortunadamente, Gikas ha vencido a la enfermedad y, con la ayuda de su equipo, ha conseguido terminar la escultura.
Desde 2018 contaban con la ayuda de MiSci, una organización privada sin animo de lucro que ya tenía listos los preparativos para colocar la estatua. Pero debido a la pandemia, MiSci está concentrando todos sus esfuerzos en los estudiantes y familias de Michigan que lo necesita, por lo que de momento este monumento a Robocop todavía necesita un sitio donde ser expuesto.
Aquí os dejamos una fotografía de la escultura junto a dos de los ayudantes de Ginka.