Durante este pasado fin de semana, los días 4 al 6 de diciembre, se ha celebrado en la capital el I Madrid Comic Pop Up, el primer salón del cómic tras el confinamiento. ¿Cómo es un salón del cómic con mascarilla? ¿Qué nos ha traído este primer salón? Vamos a intentar que sintáis lo más posible cómo ha sido este primer gran evento.
Crónica del Madrid Comic Pop Up
El primer día acudimos sin prisa pero con bastante curiosidad. Sin prisa porque a diferencia de otros años, no estaba allí antes de que abrieran para evitar lo posible las largas colas. El horario de apertura era a las 11’00 y, como me imaginaba, no tendría mucho problema para entrar.
Efectivamente, no solo no había cola sino que incluso algunos expositores no habían terminado de montar todo lo que querían mostrar y vender. El caso es que, tranquilamente y tras un café, me dispuse a entrar en el pabellón 6 de IFEMA para ver qué me encontraba.
Y nada más entrar, lo primero que vi me dejó asombrado y me dio una pista para lo que vería el resto de los días: ¡Una verdadera convención de Spider-Man! El verdadero multiverso estaba allí: Spider-Mans de todos tipos y tamaños, Spider-Gwen, Miles… Desde luego, ver en primer lugar a mi superhéroe favorito tenía que ser una buena señal.
Pero en seguida me compuse, guardé mi lado fan y volví a sacar mi lado más profesional. Debía continuar y comprobar qué nos ofrecía este nuevo Madrid Comic Pop Up. El pabellón donde tendría lugar mi fin de semana es grande (como ya he podido comprobar en otras ocasiones).
Eso, unido a que los stands estaban prioritariamente colocados a los lados, hacía que el interior del espacio diera la sensación de “vacío”: algunas tímidas exposiciones, un pequeño espacio para juegos de cartas (pequeño comparado al de otros años)… dejaban toda la parte central muy “ligera”, lo que por otro lado podría ser bueno para permitir el tránsito de la gente (volveremos a este punto).
Las exposiciones comenzaban con la “imagen” de esta edición del Madrid Comic Pop Up, Goomer, el fantástico personaje de Ricardo y Nacho. Junto a él, un gran habitáculo con objetos de la serie The Witcher, que también tuvo bastante aceptación todos los días. Otras exposiciones eran las de algunas páginas de Jorge Fornés o la de TMEO.
Y no podemos olvidar una pequeña “isla” con máquinas recreativas “vintage” en las que muchos niños jugaban a videojuegos de hace décadas, juegos que a los señores mayores como sus padres (o un servidor) les traían muchos recuerdos… ¡si incluso había un pinball!
En cuanto a los stands, había varias librerías de cómics, algunas editoriales y, por supuesto, tiendas de merchandising y de comida. Además, existían dos apartados para charlas y conferencias, un ring para lucha libre (uno de los espectáculos que más éxito tuvo) y una mesa donde se situaban los autores que cada día firmaban o dibujaban.
Muchos y variados fueron los autores y autoras que pasaron por allí o por los diferentes espacios que las editoriales pusieron. Aquí tenéis una lista completa (para animaros a venir el próximo año), pero quisiera destacar al gran Carlos Pacheco, Daniel Acuña, Fernando Dagnino, Sergio Dávila o, sin ir más lejos, Jorge Fornés e Iban Coello, a los que mi compañero Sergio entrevistó.
Al fondo del lugar, junto a los (pocos) food trucks, encontramos un artist alley que no por modesto (en tamaño) dejaba de ser muy interesante, donde podías conseguir algunos print a buen precio e incluso originales de la misma mano de autores como Francis Portela, Tirso Cons, Juapi Coffee, Juan Acosta, Patricia Casarrubios y muchos más.
Pero no solo de cómic vive el fan. En el Madrid Comic Pop Up 2021 también tuvimos un espectáculo de sables láser, grabaciones de podcasts (Tiempo de culto, en este caso), presentaciones de libros… Y charlas. Charlas sobre la vuelta a las librerías de las historietas de Esther, encuentros con actores de doblaje… Incluso la presentación del XI Festival CutreCon.
En resumen, un largo fin de semana con actos de interés para una gran parte de los aficionados a los cómics, con la posibilidad de encontrarse con algunos de sus autores favoritos e intercambiar con ellos algunas palabras, además de conseguir una firma o un dibujo.
Te dejo un breve vídeo para que tengas una panorámica general de cómo ha sido el Madrid Comic Pop Up 2021.
Crítica personal al Madrid Comic Pop Up
Pero no todo es tan bonito. Entiendo que, al ser el primer encuentro comiquero madrileño tras el confinamiento, se tuviera cierto miedo desde la organización por si el público no lo apoyaría. Eso es algo que, desde luego, nadie sabía de antemano, pero desde luego no ayudó la fecha elegida.
Y es que no fue ninguna buena idea elegir un “puente” en el que los madrileños, precisamente, suelen salir masivamente de su ciudad. ¿Motivos por los que se eligió esta fecha? Eso lo sabrán los organizadores (por cierto, ahora es la propia IFEMA la organizadora de estos eventos).
Puede pensarse que se hizo para coincidir con Juvenalia, una feria navideña que también se celebra en otro pabellón de IFEMA y que está dedicada a niños y jóvenes con muchas actividades y juegos. De hecho había una entrada combinada que resultaba más barata. Eso podría ser una respuesta si no fuera porque en el Madrid Comic Pop Up no había ningún espacio dedicado a los más pequeños. Esto, por supuesto, hizo que muchas familias decidieran no entrar ya que los peques se aburrirían pronto.
Por otro lado, antes he sido muy generoso con el espacio abierto resultante. Aquello daba una impresión de vacío, desangelado, incluso algo pobre. Si en otras ocasiones hubo problemas de movilidad debido a la enorme afluencia, este año no se dio el caso en absoluto (recordemos lo dicho sobre las fechas elegidas).
Las exposiciones… ese aspecto “volátil” se amplificaba por las, digamos, tímidas exposiciones que, en el mejor de los casos (Goomer) constaban de decenas de ilustraciones colgadas en unos pocos paneles.
Y es que, en la humilde opinión de alguien que nunca ha estado al otro lado, pero que ha asistido a muchos salones de este tipo, la actual organización no ha apostado lo suficiente por esta nueva etapa de salón comiquero madrileño. Es cierto que la gran mayoría de los autores son de renombre y de sobra conocidos (su calidad es incuestionable), pero también es cierto que ciertos autores extranjeros dan más visibilidad a este tipo de eventos, hacen que venga más público.
Esa es otra, la publicidad del Madrid Comic Pop Up ¿vosotros habéis visto anuncios en medios de comunicación fuera de nuestra burbuja? ¿habéis visto algo, aunque sea el típico locutor que no tiene ni idea de lo que está contando, pero que al menos habla de ello para que el público general sepa que existe y se acerque?
Desde luego, espero que la próxima edición del Madrid Comic Pop Up mejore mucho (IFEMA tiene experiencia y medios de sobra). Si los dos años anteriores (era pre-COVID) el llamado Comic Con Madrid tuvo muchas luces y sombras, este último salón de cómic ha arreglado algunos de sus errores pero ha pecado, sobre todo, de falta de valentía. Se necesitan más autores (extranjeros), más librerías y editoriales (tal vez bajando el precio de los stands se consiguiera) y, sobre todo, elegir una fecha más adecuada.
También hay cosas buenas, sobre todo si lo comparamos con ediciones anteriores: se han centrado en el cómic, que vuelve a ser el protagonista. Eso no significa que despreciemos las series o las películas, pero debe estar claro qué medio es el principal en un salón del cómic.
Y, para terminar, vuelvo a clamar en el desierto para pedir dos cosas que pido todos los años. Por un lado aislamiento sonoro: a veces era imposible escuchar una charla (o una entrevista) cuando había alguna actividad más “escandalosa” a varios metros.
Por otro lado, no estaría de más un pequeño lugar donde los que vamos a cubrir el evento pudiéramos descansar un momento, además de poder enviar nuestras crónicas, fotos, etc. con una mesa para escribir y algunos enchufes para el portátil o recargar el teléfono (estas instalaciones existen en el recinto, y lo sé porque yo las he utilizado en otras ocasiones, cubriendo otro tipo de eventos).
En fin, espero que estas peticiones no caigan en saco roto. Desde luego, yo pienso seguir asistiendo a estos salones por varios motivos. Y uno de ellos es para ver si mejoran. Mientras, os dejamos con una pequeña selección de lo mejor de estos salones… vosotros.
