A través de uno de los capítulos del evento de Devil’s Reign, Marvel señala la diferencia entre el cómic y la serie de Iron Fist
Con el tiempo todo acaba explicándose y sacando a la luz la verdadera razón de lo que ocurre con los productos audiovisuales. Las adaptaciones de los cómics siempre ha sido un tema bastante delicado, ya que no siempre llueve a gusto de todos y muchas de estas propuestas de traer a personajes de las viñetas a la acción real, no terminan de ser tan bien acogidas como se esperaba. Si a esto le añadimos que tenía todo para tener éxito y fracasó, la sorpresa es mayor.
¿De qué estamos hablando? Básicamente estamos haciendo referencia al intento de Netflix por elaborar su propio trozo del pastel de la gran M. Hace unos años, la plataforma de streaming comenzó a elaborar varias series que englobaban personajes más callejeros de la editorial. Todos ellos acabarían confluyendo en una serie conjunta, muy parecido a lo visto en el cine con los Vengadores. La cosa iba bastante bien hasta que llegó el turno del artista marcial Iron Fist.
Sin lugar a dudas, la serie centrada en Daniel Rand no tuvo la acogida que se esperaba, ya que se venía de un gran éxito. Las series de Daredevil y Jessica Jones fueron muy bien acogidas por parte del público y, aunque no tanto, la de Luke Cage mantuvo el tirón. No obstante, fue llegar la serie del heredero del Puño de Hierro y todo se fue al traste, aunque la verdadera razón, y por lo que estamos hoy aquí, se pudo ver más tarde en la serie centrada en el grupo.
Iron Fist de los cómics vs Iron Fist de Netflix
Nos encontramos en un momento en que la editorial de la gran M está sacando un evento muy centrado en el protector de Hell’s Kitchen. Bautizado como Devil’s Reign, nos encontramos en un momento donde Kingpin tiene demasiado poder y está castigando a los héroes, buscándoles y apresándoles. El grupo conformado por Jessica Jones, Luke Cage y Iron Man tratan de avisar a Iron Fist para que pueda tener algo preparado. Daniel se centra y dice que va a marcharse y pensará una forma de poder lidiar con esto.
En el proceso por el que nuestro héroe está preparándose para un retiro es asaltado por Crossbones y sus mercenarios para poder llevárselo preso. No obstante, es aquí en esta decisión que tomó nuestro protagonista, donde reside la gran diferencia entre el Daniel Rand de los cómics y de la serie, que seguramente hizo que llegase a fracasar en la plataforma de streaming.
Como se puede ver, Daniel siempre se ha caracterizado por un personaje enteramente tranquilo y que trata de analizar la situación para poder dar el golpe de gracia en el momento oportuno. Esto lo vemos con la decisión de marcharse, ante el aviso de sus compañeros, y elaborar una estrategia. Para la serie de Defensores no se habría visto dicho momento, ya que desde el principio se le observa bastante más impulsivo que sus compañeros.
Hay un momento de la serie donde Daniel descubre que La Mano se ha infiltrado en su propia compañía. En vez de elaborar un plan meticuloso y pensado, decide moverse por su propio impulso, algo que le cuesta bastante y que seguramente haya sido uno de los puntos débiles del personaje en estas adaptaciones de Netflix. No sé qué opináis vosotros, pero tiene sentido, ya que otros personajes como Luke Cage o Matt Murdock sí que se apegaron fuerte a su versión del cómic y fue algo muy alardeado. Compartid vuestra opinión con nosotros.