Moonfall está dando mucho de qué hablar, y no precisamente para bien. Lo último ha sido su fracaso estrepitoso durante su primer fin de semana en cines
Desde que se acercase el estreno de Moonfall, la primera gran película de ciencia ficción de 2022, mucho se ha dicho sobre ella, y poco bueno. Las críticas la han aplastado, las declaraciones de Roland Emmerich sobre el cine de superhéroes no han gustado demasiado y, ahora, tras su primer fin de semana en salas, se suma un fracaso notable en recaudación.
La película del director alemán cuenta con un monstruoso presupuesto de 140 millones de dólares, lo que la obliga a recaudar por encima de los 300 millones de dólares en todo el mundo para ser rentable.
De momento, parece que no va a ser posible, pues el fin de semana de su estreno en los EEUU apenas ha logrado 10 millones de dólares. Sin tener mucha competencia, ha sido superada ampliamente por Jackass: forever, que se ha ido a los 23,5 millones como líder en los tres días de estreno, y seguida muy de cerca por Spider-Man: No Way Home, que en su octava semana en salas alcanza unos increíbles 9,6 millones para rozar los 749 millones en USA (ya tiene a Avatar a tiro en suelo norteamericano) y crecer hasta los 1776 millones a nivel mundial.
También hay que añadir que el público mayoritario de este film no es el estadounidense. Este tipo de producciones se suele hacer con intención de triunfar en la taquilla mundial. Sin embargo, las críticas negativas y el poco interés despertado por esta epopeya de la ciencia ficción protagonizada por Patrick Wilson y Halle Berry que no ha sabido conectar con las audiencias de Norteamérica no auguran nada bueno.
En cualquier caso, habrá que esperar a las cifras mundiales cuando Moonfall se expanda a nivel internacional para ver el grado de éxito o fracaso definitivo que tiene el film. Sea como fuere, las perspectivas no son muy halagüeñas.