El nombre de Roronoa Zoro de One Piece tiene un origen sumamente peculiar. Os contamos el resumen de su historia
Gran parte de los fans de ‘One Piece’ consideran que su creador, Eiichiro Oda, es una de las mentes más prodigiosas y creativas que puedan existir, y como muestra, un botón. La creatividad de los personajes y el increíble mundo de esta serie con millones de fans acreditan este razonamiento de sus seguidores. De lo que no estamos tan seguros es si todos estos fans conocen un dato muy particular. ¿Sabíais que Eiichiro Oda está casado con Nami en la vida real?
Los orígenes de Roronoa Zoro
El origen del nombre de Roronoa Zoro tiene su procedencia en el pirata francés del siglo XVI, Francois I’Olonnais. Y nos referimos a una persona real. Este pirata existió de verdad y tiene ciertas similitudes, además de la ascendencia de su nombre con el personaje de anime.
Este antiguo cazarrecompensas y miembro de Los Piratas de sombrero de paja, es para la gran mayoría de los seguidores de la serie el primer miembro de la tripulación reclutado por Monkey D. Luffy, fundador de estos singulares piratas, y su nombre es el único que tiene un nombre de origen real y con una trágica historia detrás.
El inicio de los contactos de l’Olonnais con el mar fue por su viaje a las Antillas gracias a que se enroló en el ejército francés para cumplir con el servicio militar obligatorio. Cuando lo hubo acabado decidió quedarse en Santo Domingo y emprender una nueva vida acompañado de compañías de dudosa moral que le ofrecían una vida de pillaje y aventuras.
Gracias a sus conocimientos marinos, consiguió que el gobernador de isla Tortuga le confiara un navío, y en ese punto de su vida comenzó a forjarse su leyenda como un cruel bucanero que terminó siendo un pirata aún peor.
Fue conocido en los mares caribeños por una determinada habilidad que fue forjando con el tiempo. Este pirata gustaba de torturar de las maneras más crueles posibles a sus enemigos hasta llevarlos a la muerte. Con el tiempo fue perfeccionando sus técnicas que alcanzaron fama entre sus contemporáneos de la Edad de oro de la piratería.
Los mayores enemigos declarados de l’Olonnais fueron precisamente la Armada Española. Son incontables los numerosos abordajes que sufrieron los españoles. Actuaba con una crueldad y violencia desmedida cuando se encontraba con marineros o militares españoles. La enemistad entre Francia y España alimentó este odio por sus vecinos y le brindó la posibilidad de poder liberarlo en los mares. Fue tildado en la época como “La maldición de España”.
Entre las desdichas que pasó este pirata se recuerda una en la que con su tripulación naufragó frente a las costas de México. Esta circunstancia le dejó en bandeja a los soldados españoles allí destinados atacarlos y acabar con casi todos ellos.
Para poder sobrevivir, este pirata tuvo que fingir estar muerto y esconderse entre los cuerpos tirados y las vísceras de su tripulación debido a la carnicería de las tropas españolas. Embadurnado en su propia sangre, se mantuvo inmóvil hasta que los españoles se fueron.
l’Olonnais jamás lo olvidaría. Desde ese día juró acabar con cualquier español. Fue despiadado, cruel y no contemplaba la piedad. Con una sed de sangre desmedida, este pirata era capaz de decapitar a toda tripulación que osara interponerse en su camino.
Otro hecho significativo en la vida de este declarado enemigo de la Corona española fue con el gobernador de La Habana. Este organizó a un grupo de mercenarios para que diera caza al navío de l’Olonnais y acabara con la tripulación. La jugada le salió rana. El pirata venció a estos mercenarios y los ajustició a todos con la decapitación, menos a uno. A este le encomendó la misión de transmitir un mensaje para sus enemigos:
“En adelante no daré cuartel a ningún español”.
l’Olonnais tuvo un final trágico como se espera de persona de esta calaña. Sus días como pirata acabaron cuando había acudido a la actual Venezuela para buscar un gran tesoro que estaba en manos de una tribu indígena. El destino le deparaba una sorpresa en este su último acto de pillaje. Fue capturado por los guerreros y tuvo una cruel y espantosa muerte.
Roronoa Zoro de One Piece, alias El Cazador de piratas Zoro
Evidentemente, Roronoa Zoro no es ni mucho menos el desquiciado de l’Olonnais, pero este personaje comparte cierto gusto por utilizar la brutalidad como modus operandi, al igual que el pirata francés. Claro está, sin llegar a ese nivel de locura.
Zoro es un gran espadachín, y muchos de sus enemigos ya conocen la brutalidad de sus formas y su pericia con la espada. Aunque también es conocido por su gran lealtad. Como voz autorizada de la tripulación, Zoro se ha ganado el respeto y la confianza de sus compañeros.
Pero que nadie dude que Zoro sería capaz de acabar con cualquiera sin que le tiemble el pulso si las circunstancias así lo requieren. Aun así, evidentemente, este personaje no es un torturador desquiciado salido del mismo infierno. En cambio, ambos personajes, real y ficticio, tienen otro punto en común: Ambos piratas buscan cualquier forma para sobrevivir ante situaciones de gran riesgo.
l’Olonnais se valía de su astucia y del terror que inspiraba en sus enemigos, mientras que Zoro es un valiente con una gran capacidad de aguantar todo lo que le echen.
Y ya que nos encontramos en el universo ‘One Piece’, no os perdáis a la cosplayer Seeu que realiza un cosplay de Uta que hará que quieras vivir en el anime.
Fuente CBR