Masters of the Universe enseñó el camino a Marvel para hacer post-creditos
La escena post-créditos ha sido una constante en la industria cinematográfica en las últimas décadas. Pero lo que pocos recuerdan es que la película de 1987, Masters of the Universe, se atrevió con una audaz escena que prometía un regreso nunca concretado.
Las escenas después de los créditos o “stingers”, como se les conoce en la jerga, son un fenómeno que ha crecido exponencialmente desde los años 70 y 80. La llegada del cine digital y la demanda insaciable del público han hecho que estos easter eggs se conviertan en un estándar. Pero no siempre son sinónimo de calidad. Y cuando hablamos de Masters of the Universe, encontramos un ejemplo icónico.
Una producción atrevida
Este film de los años 80, aunque con buenas intenciones, no logra capturar la esencia de la serie animada. La adaptación, que pretendía traer a la gran pantalla la historia del famoso juguete de Mattel, dista mucho de la fantasía que los fans recordaban. A pesar de contar con un reparto de renombre, incluyendo a Dolph Lundgren como He-Man y Frank Langella como Skeletor, la historia se desvía notablemente de su origen.
El estudio Cannon Films, famoso por su enfoque impulsivo en la producción, lanzó la adaptación con grandes esperanzas. Con películas como Cobra de Stallone y Bloodsport de Van Damme en su haber, parecía que nada podía salir mal. Sin embargo, el deseo de mantener los costes bajos llevó a cambios argumentales significativos, como la introducción de un dispositivo llamado The Cosmic Key, que permitía un cambio de escenario de Eternia a la Tierra. Además, personajes icónicos como Orko fueron sustituidos por otros menos reconocibles, y elementos esenciales, como la espada de He-Man o su alter ego, el Príncipe Adam, brillaban por su ausencia.
Skeletor y su audaz promesa
A pesar de sus carencias, la película ofrece actuaciones memorables. Frank Langella, bajo capas de maquillaje, brinda un villano tan carismático que casi justifica la audaz escena post-créditos. Tras los eventos del film, el villano emerge de una piscina rosada prometiendo con firmeza: “¡Volveré!”. Una promesa que, dados los resultados de taquilla y crítica, jamás se cumplió.
Las desventuras de la película en taquilla son bien conocidas. Y aunque no fue la única causa del declive de Cannon Films, sí simboliza las malas decisiones que contribuyeron a su caída. Las conversaciones sobre una posible secuela, incluso con un guión en desarrollo, quedaron en el olvido.
En retrospectiva, la escena post-créditos de la película puede verse como un acto de optimismo desmedido. Aunque algunos podrían argumentar que la del Super Mario Bros. de 1993 podría competir por el título, eso, queridos fans, es tema para otra ocasión.
El universo detrás de los Masters
A pesar de sus fallas como adaptación cinematográfica, es sin duda un punto de referencia en la historia de la cultura pop de los años 80. Basado en una línea de juguetes que se convirtió en una sensación mundial, la historia de He-Man y su batalla contra Skeletor se convirtió en un fenómeno. Sin embargo, la travesía desde la animación hasta la gran pantalla fue cualquier cosa menos sencilla.
La serie original, He-Man and the Masters of the Universe, se emitió desde 1983 hasta 1985, y fue una serie animada que se diseñó principalmente para vender juguetes. De hecho, los juguetes se desarrollaron antes que la serie, lo que era una práctica común en esa época. Mattel, la empresa detrás de la icónica marca, creó una amplia gama de figuras de acción, cada una con su propia historia y habilidades únicas, lo que permitió a los niños sumergirse en el mundo de Eternia, donde la magia y la tecnología coexisten.
El éxito de los juguetes y la serie animada llevó a la creación de una película de acción real, con la esperanza de capitalizar la popularidad de la franquicia. Sin embargo, a pesar de tener personajes tan icónicos y una historia rica, la película no logró capturar la esencia de lo que hizo especial a serie animada y figuras de acción. Las decisiones creativas, como la omisión de elementos clave de la serie y la introducción de nuevos personajes, alienaron a muchos fans.
A pesar de estos tropiezos, la influencia de las figuras de Mattel perdura. Desde reboots en la animación hasta rumores de nuevas películas, la historia de He-Man y Skeletor sigue viva, esperando la adaptación definitiva que satisfaga a las generaciones de fans que crecieron con ellos.