¿Cómo pasó Noah Baumbach de querer huir del proyecto a estar orgulloso del taquillazo del año?
¿Qué pasa cuando un director reconocido en el mundo indie piensa que la próxima película que coescribirá es una “pésima idea”? Pues si hablamos de Noah Baumbach y del film Barbie, la respuesta es sorprendente. Sí, has leído bien, Noah Baumbach no quería tener nada que ver con Barbie al principio. Pero oye, la vida da muchas vueltas.
Cómo Greta Gerwig arrastró a Baumbach al proyecto
Imagina ser parte de un proyecto que ha superado los mil millones en taquilla. Suena bien, ¿verdad? Pero eso no era lo que Noah Baumbach tenía en mente cuando se unió al equipo creativo detrás de Barbie, la película que ha arrasado este 2023 y se ha convertido en la más taquillera del año hasta ahora. Al hombre le faltó poco para salir corriendo.
“Greta me metió en esto”, comentaba Baumbach durante una Q&A organizada por WGA West y Variety. Al principio, el guionista pensó que el proyecto era poco menos que una catástrofe en potencia. Margot Robbie, productora del proyecto a través de LuckyChap Entertainment, se acercó a Greta Gerwig para que escribiera la película. Gerwig aceptó con una condición: que Baumbach también participara.
Las razones de Baumbach
El director tenía serias dudas porque no veía personajes o tramas desarrollados. Vamos, que pensaba que el proyecto no tenía por dónde cogerse. Pero entonces Greta Gerwig le mostró unas páginas con una idea muy concreta: Barbie enfrentándose a la complejidad de la vida. Baumbach quedó fascinado; de repente, veía una historia sobre aceptar la mortalidad y las complejidades de la vida que realmente le emocionaba.
Cuando tu trabajo pasa a ser una colaboración tan fluida que sientes que es lo mejor que has hecho, algo debe estar yendo muy bien. Baumbach llegó a pensar que este era el mejor trabajo que él y Gerwig habían creado. Aunque tenía sus reservas al principio, su confianza en el juicio de Gerwig lo convenció de que el proyecto realmente tenía algo especial.
La fórmula secreta de la Muñeca Millonaria
Más allá de los prejuicios y las opiniones previas sobre Barbie, hay que tener en cuenta que esta muñeca lleva siendo un ícono de la cultura popular desde que se lanzó en 1959. Desde entonces, Barbie ha tenido innumerables trabajos, compañeros y vehículos; todo un universo que ahora se ha llevado a la gran pantalla de manera espectacular. Toda esta herencia cultural y social, que siempre ha sido un perfecto caldo de cultivo para historias, contrasta de manera interesante con las dudas iniciales de Noah Baumbach.
Y si hablamos de franquicias que han dado el salto de juguete a película, no podemos evitar pensar en Transformers o G.I. Joe. Aunque estos tuvieron un enfoque más orientado a la acción y efectos especiales, Barbie ha conseguido equilibrar el entretenimiento puro con un mensaje más profundo. Este equilibrio perfecto podría ser parte de su éxito y quizás es lo que finalmente convenció a Baumbach de subirse al carro. Ahora, si logran mantener este nivel en futuras entregas, podríamos estar ante la próxima gran franquicia cinematográfica.
Más que una muñeca
La película ha demostrado ser un fenómeno. Ha recaudado 1.300 millones de dólares y ha sido alabada por su humor, profundidad emocional y narrativa innovadora. Margot Robbie se puso en la piel de Barbie y Ryan Gosling en la de Ken, acompañados por un elenco estelar que incluye a Will Ferrell, Issa Rae y Kate McKinnon, entre otros. Este film ha roto todas las expectativas y se ha ganado el respeto tanto del público como de la crítica, mostrando que incluso las ideas que parecen “terribles” pueden transformarse en oro puro.
Es increíble lo que un poco de visión y colaboración creativa pueden hacer. Noah Baumbach pasó de estar a punto de renunciar a coescribir uno de los mayores éxitos cinematográficos del año. La moraleja de la historia podría ser: nunca subestimes el poder de una buena idea, aunque al principio no lo parezca. Ahora, ¿quién quiere ir a ver Barbie por segunda vez?