Desde líderes heroicos hasta simples figuras unidimensionales, descubre los altibajos de Optimus Prime en el mundo de los Transformers
Te voy a ser sincero, colega: si eres fan de los Transformers, sabes que no todos los Optimus Prime son iguales. Hay versiones que te llegan al corazón y otras que, bueno, mejor no hablar. Pero en el fondo, todos comparten algo en común: el Autobot Matrix of Leadership. ¿Pero cuántos realmente tienen “el toque” y “el poder”? Vamos a averiguarlo.
El bueno, el malo y el Optimus Prime
Arranquemos por el que nos robó el corazón primero: el G1 Optimus Prime de la serie de 1984. No es solo un camión rojo y azul, este Optimus es un líder honorable con una voz que hace que hasta tu abuela quiera unirse a los Autobots. Aquí es donde Peter Cullen dejó su huella, interpretando a un Prime que valora la libertad y te da calorcito en el corazón.
Ahora, a la otra cara de la moneda: el Optimus Prime de la Trilogía Unicron. Este es el clásico ejemplo de “mira, mamá, soy moderno”. Sí, tenía nuevos cuerpos y actualizaciones, pero se quedó corto en emociones. Era el jefe y ya. Ni una pizca de profundidad.
Las luces y sombras del liderazgo
Si te va lo complejo, seguro te mola el Optimus de los cómics de IDW Publishing. Aquí no tenemos al típico líder perfecto, este Prime tiene dudas, toma decisiones chungas y hasta cuestiona su propio liderazgo. Es un ser que va más allá de lo binario bueno/malo, y eso es lo que lo hace atractivo.
Por contra, si hablamos de los cómics G1, Optimus es casi una caricatura. Su muerte en un videojuego contra Megatron es un chiste malo. En serio, la pifiaron con este.
¿Renovarse o morir?
El Optimus Prime de Transformers: Rise of the Beasts supone un soplo de aire fresco. Es un tipo que empieza siendo un borde con los humanos pero que, con el tiempo, cambia su actitud. Eso sin contar que su diseño está más cerca de la estética clásica de los G1, lo cual es un puntazo.
En la versión de Michael Bay, sin embargo, el Optimus Prime que nos presentan es un tío duro pero que no cala. Mata Decepticons sin piedad y su relación con los humanos es prácticamente nula. Un bajón, vaya.
Entre la tradición y la innovación
Transformers: Animated nos da un Optimus más joven, más inexperto, pero con un arco de desarrollo genial. Va de ser un simple bot de reparaciones a desafiar a Megatron en un duelo final.
Y si queréis olvidar algo, que sea la versión de Transformers: Kiss Players. Aquí a Optimus le toca pasar por situaciones sexualizadas que son… inquietantes, por decirlo suave.
De líder Autobot a símbolo de la cultura pop
Optimus no es solo una figura icónica en el mundo de los Transformers, es un símbolo que ha trascendido las fronteras del entretenimiento geek para convertirse en una parte inconfundible de la cultura pop global. Desde su primera aparición en los años 80 hasta su última encarnación en Transformers: el amanecer de las bestias, este personaje ha experimentado una evolución que va más allá de simples actualizaciones de diseño. Las distintas versiones de Optimus no solo reflejan la historia de una franquicia, sino también cómo la cultura y las expectativas de los fans han cambiado con el tiempo.
En un sentido más amplio, el viaje de Optimus a lo largo de las décadas ofrece un espejo interesante para observar la propia historia de la narrativa de los superhéroes. Si comparas a Optimus con figuras como Superman o Spider-Man, puedes ver cómo el concepto de “héroe” ha evolucionado. Mientras que los héroes de antaño eran modelos a seguir inmaculados, las versiones modernas ofrecen una complejidad y una profundidad que reflejan las inquietudes del mundo actual. En este sentido, cada nueva versión de Optimus no es solo un reboot o una secuela, sino un reflejo de su tiempo.
