Gareth Edwards ofrece una oda a Rogue One con su nueva película The Creator. Descubre las conexiones y diferencias que establecen un paralelismo fascinante entre ambas obras
No hay duda de que The Creator sirve como un espejo distante de Rogue One, permitiendo a Edwards explorar temas y conceptos que no pudo desarrollar completamente en su incursión en Star Wars. Una cosa es segura: este director británico tiene mucho más que decir y, con suerte, seguirá haciéndolo en futuras películas. Ahora puedes disfrutar de la nueva película en cines. ¿Listo para un nuevo viaje estelar?
Una jornada estelar
Algo en el aire nos dice que Edwards se ha desatado completamente. Recordado por su controvertido paso por el universo galáctico con Rogue One, el director británico vuelve con The Creator, una película que no solo nos hace preguntarnos sobre la inteligencia artificial y la humanidad, sino que además parece ser un eco distante de su proyecto anterior en la galaxia muy, muy lejana.
Es inevitable no recordar Rogue One al ver The Creator. Aunque las polémicas y desencuentros creativos con Disney rodearon a Edwards durante su trabajo en el film de la guerra de las galaxias, la nueva cinta parece una oportunidad para que cuente la historia que siempre quiso contar. Pero, ¿hasta qué punto recicla ideas y conceptos? Sumérgete en este análisis para descubrirlo.
Armas de destrucción a la deriva
En Star Wars, el arma más temida es, sin duda, la Estrella de la Muerte. Un arma capaz de destruir planetas que hizo estremecerse a personajes como la Princesa Leia y encendió la chispa de la rebelión. En The Creator, nos encontramos con su propia versión de este descomunal artefacto: El Nómada, un satélite armado con capacidad para destruir regiones enteras.
Mientras la Estrella de la Muerte buscaba mantener el control imperial, el Nómada representa la arrogancia americana en una guerra fría contra Asia. Estados Unidos ve esta superarma como una forma de mantener el orden en el planeta, recordándonos que, a veces, la justicia es simplemente una cuestión de perspectiva.
Misiones subversivas y héroes reacios
La conexión entre ambas películas va más allá del armamento. Recordemos que en la película de Star Wars, un grupo de espías debía infiltrarse en Scarif para conseguir los planos de la Estrella de la Muerte. John David Washington, en su papel de Joshua en The Creator, comparte esta misión subversiva. Acompañado de un arma IA llamada Alphie, deben sabotear al Nómada desde dentro. Ambas tramas ofrecen héroes reacios, sacrificios y un tono oscuro que tiñe los entornos.
Uno de los momentos más emocionantes de Rogue One fue su final agridulce. Jyn y Cassian sabían que sus vidas se extinguirían, pero se mantenían esperanzados. En The Creator, Gemma Chan interpreta a Maya, una versión robótica de la esposa de Joshua, quien aparece para compartir un último y conmovedor momento con él. El final, aunque lleno de una tristeza insoportable, se enmarca en una estética tan cautivadora que es imposible apartar la vista.
Villanos complejos y guerras modernas
Si en algo destaca la nueva película de Edwards es en la complejidad de sus villanos. Mientras que el Imperio Galáctico se centraba en el poder y el control, los antagonistas en The Creator actúan bajo la creencia genuina de que están protegiendo su patria de una amenaza asiática. Esta contextualización proporciona una profundidad que faltaba en la obra de Star Wars, haciéndola más relatable con los conflictos contemporáneos.
Un viaje por la filmografía de Gareth Edwards
The Creator se siente como la culminación de temas que Edwards ha explorado a lo largo de su carrera. Desde los gigantes en Monsters y Godzilla hasta las complejidades morales en Rogue One, Edwards ha tenido una obsesión constante con cómo las criaturas y las máquinas impactan en la humanidad. En The Creator, ese enfoque encuentra su expresión más madura, combinando las lecciones aprendidas de sus proyectos anteriores para crear algo verdaderamente único.
