El próximo viernes, 24 de noviembre, se estrena en cines la nueva película de la factoría Disney, Wish, el poder de los deseos. Aquí va nuestra crítica con un solo spoiler: Darth Hater ha vuelto ☹
Wish, el poder de los deseos (no cumplidos)
¡Y mira que hacía tiempo de no se dejaba ver por estos lares a Darth Hater! Pero no puede ser de otra manera con esta película. Pero, empecemos por el principio.
En Wish: El poder de los deseos, Asha, una optimista con mucho ingenio pide un deseo tan potente que le responde una fuerza cósmica, una pequeña bola de energía ilimitada llamada Estrella. Juntas, Asha y Estrella se enfrentan a un imponente enemigo para salvar a su comunidad y demostrar que cuando la voluntad de una persona conecta con la magia de las estrellas, pueden ocurrir cosas maravillosas.
Ahora, si queréis saber tooodo sobre la película, incluido el villano… ved el tráiler (avisados estáis)
Siendo realmente objetivos no podemos decir que nada esté mal en Wish: El poder de los deseos. Técnicamente es irreprochable. Visualmente espectacular. Argumentalmente es entretenida y divertida. Los personajes son encantadores e inspiradores…. Es decir, es todo tal y como esperaríamos de una película de animación de Disney Studios.
Y este es su mayor problema. Que todo es como esperaríamos. No hay sorpresas, no hay ningún atisbo de originalidad, ningún intento de arriesgar (argumental o técnicamente). Una película completamente formulaica, que ha seguido estrictamente la “forma de hacer películas de Disney” y el resultado es el esperado: bonito de ver, pero similar a cientos más. Una sucesión bien llevada de recursos e ideas que hemos visto mil veces ya.
La felicidad de la ignorancia
Lo que nos cuenta Wish: El poder de los deseos, es la eterna pregunta de si debemos ser felices a toda costa ¿Merece la pena ser feliz si, a cambio, perdemos parte de nosotros mismos, como nuestros deseos, nuestros anhelos y esperanzas? ¿Estamos dispuestos a pagar el precio que sea para conseguir nuestra felicidad? Cámbiese felicidad por seguridad y tendremos una segunda e interesante lectura, con una analogía de la lucha por la libertad, tanto individual como colectiva.
El discurso del villano (antes de ser realmente malvado) es que el conocimiento no da la felicidad, mientras que nuestra protagonista, Asha, defiende que además de felicidad, el conocimiento no otorga libertad: libertad de elegir y, por ende, de vivir como queramos, con nuestros errores y nuestros aciertos, con nuestras derrotas y victorias.
A través del corazón comprendemos el mundo
Esta frase, que pronuncia uno de los personajes, resume la idea principal de esta película. En Wish: El poder de los deseos, se descubre el poder de nuestros sueños como algo sumamente poderoso. Y vivir sin sueños, sin deseos, sin esperanzas, es estar incompleto, es como estar muerto en vida (algo que se nos muestra muy gráficamente con uno de los personajes).
Desde el principio se nos habla de la conexión cósmica de la protagonista y su padre, un filósofo (lo cual quiero ver como algo nada aleatorio). Será esta unión de los sueños, los deseos y las estrellas, las que nos llevará al final, previsible pero no por ello menos encantador, de la película que, en resumen, nos anima a seguir soñando, a seguir teniendo esperanzas y, por supuesto, a seguir pidiendo deseos para que el mundo sea algo mejor (de ahí el estado final de la protagonista al finalizar la película).
El material del que están hechos los sueños
Esta frase tan bonita podría ser un slogan de Coca Cola o de la misma Disney… y es que Wish: El poder de los deseos no deja de ser una “celebración” de los 100 años de Disney, un imperio que, en sus mismas palabras, “empezó con un sueño”.
Y ponía entre comillas lo de celebración porque es un eufemismo. Wish: El poder de los deseos es un descarado homenaje del estudio a sí mismos. El primer guiño a películas clásicas como Bambi es divertido, pero llega un momento que son tan descarados (y conscientes) que pierden la gracia… eso sin contar con que los principales protagonistas de las películas de Disney aparecen “iluminando” los títulos de crédito… o el colofón final, la escena poscréditos.
Wish: El poder de los deseos está dirigida por el ganador del Oscar Chris Buck (Frozen. El reino del hielo, Frozen II) y Fawn Veerasunthorn (Raya y el último dragón). Lee y Allison Moore (Night Sky, Manhunt) son las guionistas del proyecto. Con canciones originales de la cantante y compositora nominada al Grammy Julia Michaels y del productor/compositor/músico ganador del Grammy Benjamin Rice, además de música del compositor Dave Metzger
Wish: El poder de los deseos se estrena solo en cines el 24 de noviembre.