Llega Jason Statham acompañado de David Ayer, director de Escuadrón Suicida
Llega a nuestras pantallas la nueva película protagonizada por Jason Statham, acompañado de David Ayer, (director de Escuadrón Suicida (2016) pero también de U-571 (2000), Training Day (2001) o Corazones de acero (2014) entre otras) y del guionista Kurt Wimmer, al que debemos obras como Total Recall: Desafío total (2012), Point Break (2015), Los chicos del maíz (2020) o Los mercen4rios (2023).
Sinopsis
Un “beekeeper” es un operativo de alto nivel a quien solo se recurre en situaciones extremas de emergencia nacional. Cuando Adam Clay (Jason Statham), agente retirado, se pone en marcha de forma independiente después de descubrir una conspiración en las más altas esferas del gobierno, ningún mecanismo de seguridad puede evitar que utilice todos sus recursos para hacer justicia.
Protegiendo la colmena
Si habéis visto el tráiler o habéis leído la sinopsis, ya sabréis a lo que os enfrentáis: una película más al estilo Statham. Ni más ni menos. Acción bien rodada con un guion sencillo pero eficiente. Entre medias, algunos retazos de crítica social… pero no demasiado.
El desencadenante de la acción (que no deja de ser un MacGuffin) es interesante. El propio guionista, Kurt Wimme, ha afirmado que algo parecido le ocurrió a una familiar suya y, a partir de ahí, imaginó “qué podría hacerle a esa gente. Que hace daño a los desamparados”, así que se inventó “un caballero blanco, un guerrero salvador para quienes realmente lo necesitan”
Repito, son declaraciones del guionista… y son tramposas porque ese “caballero blanco” no soluciona totalmente el problema. Pero eso son flecos de la historia que no interesan a prácticamente nadie que va a ver este tipo de cine ¿no?
La película va avanzando y acelerando en espectacularidad. Aunque no nos sorprenda en ningún momento, está tan bien narrada y dirigida que nos mantendrá atentos a la pantalla las dos horas que dura. Veremos al flemático Adam Clay (Jason Statham) hacer “magia” con sus manos, ya que es un prestidigitador de la violencia: apenas si utiliza armas de fuego, aunque cualquier objeto es un arma mortal en sus manos.
También destaca de este personaje su profundo sentido moral, que le obliga a dar siempre una oportunidad a sus enemigos (al menos a las abejas obreras). Pero esta moral está siempre supeditada a su objetivo primordial, que cumple como si de un Terminator se tratara.
Pero su personaje es demasiado tópico, es de esos tipos duros totalmente intercambiables: con barba de tres días, mal encarado, la misma mueca en la cara, el mismo gruñido como respuesta preferida… y la misma eficacia frente a los enemigos, da igual su número o potencia de fuego.
Además de Clay (Statham), destacan otros pocos personajes como la Agente Especial del FBI Verona Parker, interpretada por Emmy Raver-Lampman y a quien conocemos como Allison Hargreeves en The Umbrella Academy y que tiene un papel empoderado que defiende con dignidad, pero ensombrecido frente al del omnipresente (y omnipotente) protagonista. Eso sí, su parte con su compañero es una agradable buddy cop comedy pero que no encaja en esta historia, diluyendo las emociones que debería tener Verona en realidad.
Del resto de personajes, incluido el representado por Jeremy Irons no merece la pena hablar, sobre todo del supuesto villano de la trama, Dereck Danfort, interpretado por Josh Hutcherson (Peeta en Los juegos del hambre), cuyo personaje (por culpa del guion) es insulso, difícil de creer y totalmente olvidable.
Señor, protégenos del Protector
El único problema de esta película es, a la vez, su virtud: es una película hecha a la medida para Jason Statham, y eso se nota: pocos diálogos, muchas escenas de lucha cuerpo a cuerpo y una trama simple, que no nos despiste de lo verdaderamente importante: el puro espectáculo.
Wimmer no es un mal guionista en absoluto, pero en Beekeeper: el protector no ha dado lo mejor de sí: es paternalista con el espectador (no se cansa de recordarnos que la colmena es la clave), tiene frases que pretenden ser épicas y resultan risibles, hay personajes totalmente histriónicos… que no encajan con la mayor parte de los personajes y subtramas (sobrios en su mayoría), etc.
La película es dispersa y muy simple (sí, me repito), y se enreda ligeramente en algunas subtramas a las que, al final, no le da ninguna importancia. Además, al final toda la crítica se debilita de una forma cobarde que, desgraciadamente, el guion no aprovechó.
A pesar de todo ello, es una película bien hecha, que resulta muy entretenida y que será muy del gusto de muchos de nosotros, ya que no deja de ser una fantasía que muchos hemos tenido: tomarnos la justicia por nuestra mano frente a esos estafadores poderosos que se creen ajenos a la ley.