Alien: Rubicon es la nueva parodia de The Asylum que contará la historia de un alienígena rumbo a Washington
Mientras “Alien: Romulus” sigue causando furor en las salas de cine, The Asylum, el estudio conocido por sus mockbusters, ha vuelto a la carga con su más reciente “joya” titulada “Alien: Rubicon”. Como era de esperar, el tráiler de esta nueva película promete exactamente lo que sus predecesoras han ofrecido: una mezcla de absurdo y clichés de ciencia ficción, pero con ese toque inconfundible que solo The Asylum sabe brindar.
El legado de The Asylum
Desde sus inicios, The Asylum ha sido conocido por tomar grandes éxitos de taquilla y crear versiones de bajo presupuesto que rozan lo absurdo. Sin embargo, lo que muchos consideran “cine basura” ha encontrado un nicho que le ha permitido prosperar. Películas como “Sharknado” y “Transmorphers” no solo se han convertido en éxitos de culto, sino que han establecido un modelo de negocio que, aunque poco convencional, ha demostrado ser sorprendentemente rentable.
El hecho de que el estudio siga produciendo películas como Rubicon es testimonio de su éxito en este peculiar mercado. Estas producciones no solo atraen a aquellos que buscan una risa fácil o una experiencia de cine B, sino que también generan una conversación en torno a la cultura pop y el cine de entretenimiento.
La premisa de la película no se aleja mucho de lo que ya hemos visto en el género. La trama sigue a un enorme alienígena que aterriza cerca de Nueva York, destruyendo todo a su paso mientras se dirige hacia Washington D.C. Según la sinopsis oficial, si esta criatura logra llegar a la capital, desencadenará una invasión a gran escala. Con el tiempo en su contra, un grupo de científicos y militares se une para detener esta amenaza extraterrestre antes de que sea demasiado tarde.
¿Más de lo mismo?
Si bien es fácil descartar Rubicon como otro intento más de The Asylum por capitalizar un éxito de taquilla, la realidad es que hay un encanto particular en ver cómo este estudio toma conceptos ya establecidos y los lleva a extremos ridículos. El tráiler de la película no decepciona en este aspecto: efectos especiales de baja calidad, diálogos que parecen sacados de una película de los años 50, y un alienígena que, en lugar de inspirar miedo, probablemente provoque más de una carcajada.
La trama es sencilla, pero es precisamente esa simplicidad la que hace que estas películas sean entretenidas para algunos. No se trata de una narrativa compleja ni de personajes profundos, sino de una acción desenfrenada y situaciones tan inverosímiles que terminan siendo divertidas.
Una nueva incursión en la ciencia ficción de bajo presupuesto
El alienígena protagonista de “Alien: Rubicon” no es simplemente una criatura cualquiera; es una amalgama de los peores miedos humanos, envuelta en un diseño que parece salido directamente de los estudios de efectos especiales de los años 80. La criatura, a pesar de su evidente falta de sofisticación, se convierte en el foco central de la película, representando una amenaza que, aunque predecible, logra mantener la atención de los espectadores por lo grotesco de su apariencia y su destructividad.
Comparado con otros monstruos de The Asylum, este alienígena destaca por su tamaño colosal y su imparable determinación. Mientras que criaturas como los tiburones voladores de “Sharknado” juegan más con lo absurdo, el alienígena de “Rubicon” pretende ser un recordatorio de lo implacable que puede ser una invasión extraterrestre, incluso en un mundo donde lo ridículo es la norma. Este enfoque podría resonar con aquellos que buscan una película de monstruos clásica, aunque sin muchas expectativas de realismo.
Una cita ineludible para los fans del cine B
Con un estreno programado para el 23 de agosto de 2024, “Alien: Rubicon” se suma a la lista de producciones de The Asylum que seguramente atraerán a su base de seguidores. Aunque no todos disfrutarán de este tipo de cine, para aquellos que aprecian el género B y buscan algo que no se tome demasiado en serio, esta película podría ser una opción interesante para una noche de risas y diversión.
The Asylum ha demostrado una y otra vez que, incluso en un mundo donde los efectos especiales y las grandes producciones dominan, todavía hay espacio para el cine que apuesta por lo ridículo y lo exagerado. Rubicon no será una obra maestra, pero seguramente cumplirá con su objetivo: entretener a su audiencia de la manera más absurda posible.
