Descubre la primera película de Marvel en llegar a la gran pantalla

El origen cinematográfico de Marvel es más curioso de lo que parece, y todo comenzó con un pato parlante

Cuando hablamos de Marvel y sus películas, es natural que lo primero que venga a la mente sea el Marvel Cinematic Universe (MCU). Desde Iron Man hasta Avengers: Endgame, este universo ha redefinido lo que significa llevar héroes de cómics a la gran pantalla. Sin embargo, la historia cinematográfica de Marvel comenzó mucho antes, con proyectos que hoy pueden parecer insólitos o incluso olvidados. Entre ellos, destaca Howard the Duck, un filme que se ganó un lugar especial —aunque polémico— en la historia del cine.

¿Cuál fue la primera película de Marvel?

Para muchos, la primera película de Marvel es Iron Man (2008), ya que fue el inicio del MCU. Sin embargo, ese honor pertenece a Howard the Duck (1986), un proyecto completamente diferente que marcó el debut de Marvel en la gran pantalla. Esta película, producida por George Lucas, cuenta la historia de Howard, un pato alienígena que aterriza accidentalmente en Cleveland y vive una serie de desventuras mientras intenta regresar a su planeta natal.

Aunque el argumento recuerda vagamente a E.T., el tono y la ejecución de Howard the Duck fueron un completo desastre. La película mezclaba comedia, ciencia ficción y aventura de forma desordenada, lo que resultó en un fracaso crítico y comercial. A pesar de ello, es imposible ignorar que esta película fue el primer gran intento de Marvel en los cines, aunque no de la manera que los fans esperaban.

El extraño legado de Howard the Duck

A pesar de su recepción desastrosa, Howard el Pato no ha desaparecido del radar de Marvel. Con el tiempo, el personaje ha ganado cierto estatus de culto y ha realizado breves cameos en el MCU, comenzando con Guardianes de la Galaxia (2014). Incluso apareció en Avengers: Endgame durante la batalla final, consolidando su lugar como un pequeño pero curioso elemento del universo compartido.

La actriz Lea Thompson, quien protagonizó la película original, ha abogado por un reboot moderno del personaje dentro del MCU. Aunque esto no se ha concretado, Howard the Duck sigue siendo una pieza fascinante en la historia de Marvel, especialmente ahora que el estudio domina la taquilla mundial.

Antes del MCU

El camino hacia el cine no fue directo para Marvel. En las décadas de 1970 y 1980, los superhéroes eran más populares en la televisión que en el cine. Series como El increíble Hulk (1977), protagonizada por Lou Ferrigno y Bill Bixby, marcaron el comienzo de las adaptaciones live-action de Marvel. También hubo intentos con Spider-Man y Doctor Strange, aunque estos proyectos eran más pilotos de televisión que películas propiamente dichas.

Incluso el Capitán América tuvo su momento en la pequeña pantalla, con dos películas para televisión en 1979 protagonizadas por Reb Brown. Estos proyectos fueron los primeros pasos de Marvel hacia el live-action, aunque estuvieron lejos de alcanzar el nivel de calidad y éxito que más tarde lograrían con el MCU.

El verdadero pionero del éxito

Si bien Howard the Duck fue la primera película de Marvel, el honor de ser el primer éxito le pertenece a Blade (1998). Este filme, protagonizado por Wesley Snipes como un cazador de vampiros, demostró que las películas de Marvel podían ser oscuras, serias y exitosas en la taquilla. Además, marcó el inicio de una nueva era, allanando el camino para producciones como X-Men (2000) y Spider-Man (2002).

Lo interesante de Blade es que no se promocionó como una película de superhéroes. Más bien, fue presentada como un thriller de acción y terror, lo que ayudó a atraer a una audiencia más amplia. Su éxito permitió que Marvel comenzara a pensar en grande, preparando el terreno para lo que eventualmente se convertiría en el MCU.

Howard y su lugar en la historia

Aunque a menudo es motivo de burla, Howard the Duck ocupa un lugar único en la historia de Marvel. Fue un primer intento ambicioso de llevar los cómics a la gran pantalla, aunque con resultados cuestionables. Con el tiempo, el personaje ha encontrado una segunda vida dentro del MCU, recordándonos que incluso los fracasos pueden ser importantes.

Quizás algún día Howard tenga su redención con una película moderna que aproveche mejor el potencial del personaje. Hasta entonces, sigue siendo un recordatorio de que, para llegar al éxito masivo del MCU, Marvel tuvo que empezar con un pato.