El universo de Spider-Man de Sony llega a su fin tras Kraven el Cazador

Sony ha decidido dar una pausa a su ambicioso universo de Marvel tras las malas críticas y las bajas recaudaciones

Este fin de semana, Kraven llega a los cines, y con él, parece que también el fin del universo Spider-Man de Sony (conocido como SPUMC, por sus siglas en inglés). Tras años de proyectos con personajes secundarios del mundo de Spider-Man, Sony ha decidido dar marcha atrás en sus planes. ¿La razón? Críticas negativas, el rechazo de los fans y una taquilla en declive.

Un cambio de rumbo hacia Spider-Man

Según información de The Wrap, la compañía ha optado por suspender su lista de spin-offs basados en personajes relacionados con Spider-Man, dejando claro que, al menos por ahora, no habrá más experimentos.

Un importante agente de talentos comentó a la publicación: “Han desarrollado lo que querían por ahora. Ahora todo se centra en la próxima película de Spider-Man.” De acuerdo con fuentes internas, Sony planea priorizar Spider-Man 4 (co-producida con Marvel Studios) y la esperada Spider-Man: Beyond the Spider-Verse. En el ámbito televisivo, la serie Spider-Noir también será un foco principal, destacando finalmente al personaje que realmente importa: Spider-Man.

¿Por qué el universo Spider-Man fracasó?

Cuando Venom debutó en 2018, sorprendió con casi 900 millones de dólares en taquilla, a pesar de sus críticas mixtas. Sin embargo, las secuelas (Venom: Let There Be Carnage y Venom: The Last Dance) no lograron mantener ese nivel de éxito, con la última convirtiéndose en la película peor recaudada de la trilogía.

El verdadero punto de inflexión llegó con fracasos como Morbius y Madame Web, que no solo se convirtieron en objeto de burlas en redes sociales, sino que también fracasaron estrepitosamente en taquilla.

Un insider de Sony reconoció: “El problema más grande con los spin-offs de Spider-Man ha sido la falta de control de calidad. Las películas simplemente no son buenas.” También añadió que, en algunos casos, estas películas no respondían a la demanda de los fans, como sucedió con Madame Web: “Es un escenario sin salida cuando nadie pide una película y esta, además, es mediocre.”

Kraven y el fin de los spin-offs de Sony

Con la llegada de Kraven the Hunter, Sony parece haber aprendido la lección. Los intentos de crear un universo compartido, como los de Venom y Morbius, fracasaron al igual que el enfoque de películas independientes como Madame Web. Ahora, el estudio se enfrenta a un futuro incierto con sus licencias de Marvel.

Tras el fracaso de The Amazing Spider-Man 2, Sony tomó una decisión arriesgada al asociarse con Marvel Studios en 2015. Gracias a esa colaboración, Spider-Man volvió a brillar en películas como Captain America: Civil War y Spider-Man: No Way Home, que cosecharon tanto éxito crítico como comercial. Sin embargo, cuando Sony intentó volver a tomar el control creativo de su personaje, el resultado fue un desastre.

El futuro de Spider-Man y los spin-offs olvidados

El cambio de enfoque no solo afecta a los spin-offs ya lanzados, sino también a proyectos que nunca vieron la luz, como Silver Sable y El Muerto, que llevaban tiempo en desarrollo sin avances concretos. Incluso los rumores sobre un posible Agent Venom (sin Tom Hardy) parecen haber quedado en el olvido.

Por ahora, Sony se enfocará en su colaboración con Marvel Studios y en fortalecer la presencia del Hombre Araña en el cine y la televisión. Esto incluye nuevas historias que se alejan de los experimentos fallidos y que buscan rescatar la calidad narrativa que el público demanda.

Un adiós temporal… ¿o definitivo?

Aunque esta decisión marca el fin de una era, Sony no descarta volver a explorar su universo Marvel en el futuro. Sin embargo, si esto sucede, necesitarán un equipo creativo renovado y, según los rumores, sin la participación de Avi Arad, cuya dirección ha sido objeto de críticas.

Los fans pueden esperar un futuro brillante para Spider-Man, tanto en el MCU como en proyectos animados como Beyond the Spider-Verse. Mientras tanto, queda claro que Sony ha escuchado el mensaje de su audiencia: menos spin-offs innecesarios y más calidad.