El director de The Flash habla por primera vez sobre las razones detrás del fracaso del filme y apunta a factores más allá de su control
En 2023, The Flash, protagonizada por Ezra Miller, llegó a los cines con grandes expectativas, pero terminó siendo uno de los mayores tropiezos de DC Studios. A pesar de que James Gunn, co-CEO del estudio, lo calificó como “una de las mejores películas de superhéroes”, la realidad fue muy distinta. La cinta recaudó solo 271 millones de dólares a nivel mundial frente a un presupuesto estimado de 200-220 millones, generando pérdidas considerables.
Ahora, Andy Muschietti, director del proyecto, ha compartido su perspectiva sobre el fracaso en una entrevista reciente. Según el cineasta, hubo una combinación de factores externos e internos que complicaron la recepción del filme.
Una crisis que impactó al proyecto
En la entrevista, Muschietti señaló que parte del problema radicó en las polémicas en torno a Ezra Miller: “Se trata de una situación de salud mental. Hicieron un gran trabajo como actor, pero enfrentaron problemas legales y de relaciones públicas que fueron un revés importante justo antes del estreno”, comentó. Miller, conocido por sus problemas legales en Hawái y otras controversias, generó una atención mediática negativa que afectó la promoción de la película.
El director también reconoció que, al tratarse de un proyecto de alto presupuesto, las expectativas eran altísimas: “Cuando haces una película de 200 millones, el estudio espera que atraiga a todo el mundo, incluso a tu abuela. Pero esta cinta no logró conectar con todos los públicos.”
El agotamiento del género de superhéroes
Otro punto clave mencionado por Muschietti fue el cansancio del público con el género de superhéroes, un fenómeno que ya afecta a muchas producciones similares. “Años después, entendí que The Flash no logró conectar con los cuatro cuadrantes demográficos. Por ejemplo, muchas mujeres simplemente no estaban interesadas en el personaje“, explicó.
Aunque la serie de The Flash en CW fue un éxito para la televisión, el personaje no tuvo el mismo impacto en la gran pantalla. Además, el contexto del universo cinematográfico de DC, que atravesaba un proceso de reestructuración bajo la dirección de James Gunn y Peter Safran, tampoco ayudó a generar entusiasmo.
Un argumento que no convenció del todo
La trama de The Flash seguía a Barry Allen mientras viajaba en el tiempo para intentar salvar a su familia, lo que desencadena consecuencias catastróficas. Aunque el guion tenía potencial, los cambios en la realidad del personaje y la introducción de múltiples líneas narrativas parecieron abrumar al público general. A pesar de contar con un 63% en Rotten Tomatoes y con defensores de su propuesta, no logró atraer al público casual ni convencer a los críticos más exigentes.
Muschietti, sin embargo, se mostró satisfecho con el resultado final y defendió su película: “Estoy muy contento con lo que logramos, y la recomiendo mucho. Fue una gran experiencia, pese a los desafíos.“
¿Qué le espera al personaje en el futuro?
Aunque el futuro del personaje en el universo DC es incierto, James Gunn ha dejado la puerta abierta para un posible regreso. Cuando se le preguntó en redes sociales por qué proyectos como Clayface avanzaban antes que otros relacionados con Wonder Woman o The Flash, Gunn respondió que están “en pausa” respecto al desarrollo de nuevas películas del velocista escarlata. Esto indica que se está considerando algo relacionado con Barry Allen, aunque sin confirmaciones oficiales.
Por ahora, The Flash se mantiene como un ejemplo de cómo una combinación de factores —desde problemas personales de los actores hasta fatiga del género— puede determinar el éxito o fracaso de una película.
¿Es el fin de Barry Allen en el cine?
No necesariamente. El personaje de The Flash tiene un legado importante tanto en cómics como en adaptaciones anteriores, y el concepto del “multiverso” sigue siendo un recurso atractivo para futuros proyectos. Quizá sea solo cuestión de tiempo antes de que Barry Allen vuelva a correr en la gran pantalla, esta vez bajo un contexto más favorable y con un enfoque renovado.
Con su mezcla de altos riesgos, grandes expectativas y desafíos inesperados, The Flash es un recordatorio de que incluso las producciones más ambiciosas pueden tropezar en su camino al éxito. ¿Podrá el velocista más famoso de DC redimirse en el futuro? Solo el tiempo lo dirá.