Vamos, que el hecho de que James Gunn esté preparando su propia versión cinematográfica del Hombre de Acero ha dejado sin hueco (al menos por ahora) a la secuela animada de Smallville. Y eso que llevaban trabajando en ella desde 2021, con la implicación directa de Welling, Rosenbaum, Gough y Miles Millar, el otro co-creador original.
Una de cal y otra de arena para los fans
Pese a todo, Gough no pierde la esperanza. Aseguró que, en esta industria, “todo vuelve de una forma u otra”, citando como ejemplo el reboot de Buffy, cazavampiros que está cocinándose en Hulu. “Esto puede tardar, pero no está muerto”, vino a decir.
Mientras la animación de Smallville se queda en pausa indefinida, DC Studios no para. De hecho, se están preparando para lanzar la campaña “Summer of Superman”, que servirá de calentamiento para el estreno de la nueva película de Superman dirigida por James Gunn, con David Corenswet como protagonista. La cinta tiene previsto su aterrizaje en cines para el 11 de julio de 2025, y será el pistoletazo de salida para el renovado Universo DC en la gran pantalla.
El problema, claro, es que con este nuevo enfoque de Gunn, Warner prefiere no mezclar universos, estilos ni narrativas. Y eso deja a Smallville, una serie muy querida pero nacida en otra era televisiva, relegada a un segundo plano.
A diferencia de otras adaptaciones, Smallville apostó por un enfoque más terrenal y de desarrollo progresivo del héroe, sin traje ni vuelos en sus primeras temporadas. Pero eso no impidió que se convirtiera en un fenómeno de culto. Y por eso el regreso en animación tenía tanto sentido: una oportunidad para explorar nuevas historias, sin las limitaciones del formato de acción real y con el elenco original de vuelta.
Y si encima logran recuperar a personajes emblemáticos como Chloe, Lana o Lois, el hype puede dispararse de nuevo. Por ahora, toca esperar… y cruzar los dedos para que el sol vuelva a salir sobre Smallville.